Limpieza y deficiencias en la vía pública continúan siendo las principales preocupaciones de los vecinos de València. El informe anual de quejas, sugerencias, reclamaciones y relaciones con el Defensor del Pueblo y el Síndic de Greuges de 2017 así lo refleja.
Las quejas por limpieza han aumentado un 22 %, al pasar de 1.146 a 1.407, y crecen un 54,45 % las referentes a problemas en espacios públicos, al pasar de 696 de 2016 a 1.075 el año pasado. En cuanto a jardinería se alcanzan las 945, un 48,8 % más que en 2016, cuando el consistorio contabilizó 635.
Las estadísticas de 2017 recogen un total de 10.024 peticiones vecinales desde el 1 de enero hasta el 31 de diciembre. De éstas, 8.491 han sido sugerencias, 854 del tipo reclamación, 561 quejas al Síndic de Greuges, 52 al Defensor del Pueblo, y otras 66 sin especificar.
Aunque la oposición hacía énfasis hace unos días del incremento de las quejas, el concejal de Govern Interior, Sergi Campillo, defendía que la mayor accesibilidad a los canales del ayuntamiento es lo que ha disparado las cifras.
La reestructuración de la página web municipal ha permitido, según Campillo, una mayor participación ciudadana, al recopilar un 37,63 % más de sugerencias que en 2016. «Aquel que quería comunicar una reclamación se encontraba a menudo con el problema de no saber cómo hacerlo a través de la web municipal, que es el canal por el cual entran el 86 por ciento. Ahora disponen de cuatro opciones muy diferenciadas, bien para solicitar información sobre algún servicio municipal, bien para hacer alguna sugerencia o trasladar alguna queja», explicaba el edil de Compromís .
Los desperfectos o carencias en parques y jardines continúan siendo lo más destacable en cuanto a peticiones (578), aunque el tema de la poda de árboles- bien por falta de ella, o por exceso- sigue generando opiniones encontradas en la ciudadanía, a razón de casi una petición diaria al año (367). También el cambio de ubicación de los contenedores (171) o su deficiente estado (56) son motivo de llamadas al consistorio.
Las molestias generadas por la contaminación acústica también crecen un 25,06 % en el último ejercicio. Colectivos como Russafa Descansa mantienen su particular batalla contra el ruido que provoca el ocio en este barrio de l'Eixample.
Los excesos del botellón, especialmente en Benimaclet o Creu Coberta, el tráfico rodado y los horarios de los casales falleros continúan siendo recurrentes. En cuanto a la reparación de deficiencias en vía pública, destacan las de alumbrado (424), por baches en la calzada (367), por roturas o fugas en alcantarillado (113), la demanda y sustitución por deterioro de mobiliario urbano (91), la supresión de barreras arquitectónica (62) y por último, el estado de las fuentes ornamentales (18).
También crecen las reivindicaciones en el apartado de señalización viaria en 2017 (876), respecto a 2016 (498), por lo que se registra un incremento del 75,90 %. Señalización horizontal, vertical, semáforos, carril bici, así como bolardos y maceteros copan las quejas vecinales, mientras que apartados como estaciones de Valenbisi, zona azul o zona naranja, apenas registran incidencias.
Uno de los ruegos más persistente es el referente a una mayor actuación por parte de la Policía Local, con 811 peticiones en un año, así como más control y erradicación de las plagas, con 264. La exigencia de medidas contra los excrementos de mascotas en calles y aceras es otro frente importante, pues son 113 entradas las que se registran en 2017.
Las áreas y delegaciones con mayor número de traslados - se informa al servicio una determinada petición sin que exija respuesta- son Medio Ambiente y Cambio Climático, con 2.889, y dentro de ella, la delegación de Gestión de Residuos Sólidos (1.345), Parques y Jardines (1.019). Le sigue el Área de Movilidad Sostenible (1.448 traslados) y dentro de ella, Infraestructuras del Transporte Público (1.223). En cuanto a peticiones de informe - aquí se exige la respuesta del servicio gestor a la Oficina de Quejas-, son Movilidad Sostenible (265), Desarrollo Urbano y Vivienda (165), y Medio Ambiente y Cambio Climático (144).
Las modificaciones introducidas en los canales de acceso además de simplificar y facilitar que las reclamaciones vecinales lleguen al servicio municipal responsable, permiten «una información más exhaustiva sobre aquello que importa al vecindario de nuestra ciudad, y que permite una respuesta mucho más esmerada», manifestaba Campillo. Algo no compartido por PP y Cs que ve al Govern de la Nau «incapaz de dar respuesta a las necesidades de los valencianos».
