La reformulación del planeamiento del barrio singular del Grau, que ultima el arquitecto José María Tomás, contempla la construcción de un nuevo puente para el tráfico rodado y pasarelas peatonales para coser los barrios de Moreras y Natzaret con el Grau. A falta de que se construya la prolongación del túnel de Serrería, que permitirá prolongar la avenida de Francia y la Alameda hasta la fachada marítima, el nuevo planeamiento del Grau incide en la mejora de la movilidad y las conexiones norte-sur tanto para tráfico rodado, como para bicicletas y peatones, una reivindicación histórica de los barrios del Marítimo.
El nuevo puente proyectado sobre el antiguo cauce estará cerca de la pasarela del Cuc de Llum, construida para la Fórmula 1, en desuso durante años, y cuyo futuro aún está por definir puesto que el planeamiento también contempla pasarelas peatonales para mejorar la permeabilidad entre los barrios de Natzaret y Moreras con el Grau.
Con este nuevo viaducto, el Jardín del Turia sumará en sus poco más de seis kilómetros de extensión 19 puentes, cinco de ellos de carácter histórico, otros cuantos modernos, algunos de autor, unos necesarios y otros prescindibles. Será en todo caso el último puente para tráfico rodado del cauce y permitirá liberar de coches el puente de Natzaret (1931) una pasarela histórica de hormigón y forja, con seis carriles para el tráfico, que espera desde hace años su rehabilitación y que constituye casi la única vía de comunicación con la ciudad de los vecinos de la zona. El nuevo planeamiento prevé igualmente adecentar la pasarela que cruza las vías ferroviarias desde el Oceanogràfic hasta las Moreras.
Adiós a los canales de Nouvel
Además de mejoras en la movilidad, el nuevo planeamiento contempla la creación de un gran espacio verde en la conexión del PAI del Grau con la Marina de València y el puerto, lo que en su día se definió con delta verde. Los canales previstos en el Grau por Jean Nouvel, ganador junto con el despacho alemán GMP del concurso de ideas convocado por el ayuntamiento para el diseño de este sector desaparecen en la reformulación. No así los edificios en altura, puesto que la filosofía es liberar el mayor espacio público, reducir la huella con torres de viviendas y permitir más zonas verdes.
El concejal de Desarrollo Urbano, el socialista Vicent Sarrià, encargó en marzo de 2017 al arquitecto José María Tomás la reformulación del planeamiento del PAI del Grau para, sin alterar la edificabilidad prevista, intentar abaratar los costes del sector eliminando parte del circuito urbano de Fórmula 1 y renunciando a los canales de agua previstos. El encargo está prácticamente terminado y la previsión es presentarlo el mes que viene. La aprobación del nuevo planeamiento allana el camino para la presentación del desarrollo urbanístico por parte de los propietarios del suelo, en manos de del consorcio empresarial Atitlan, Adif y varios pequeños propietarios.
