La oposición centra las críticas en materia de Gran Fira a la cuestión económica y al empleo de la fórmula de pago a base de contratos menores. En ese tema insistió ayer Ciudadanos y el Partido Popular anuncia que hoy aportará datos sobre el coste del mes de actividades y dicha política de fraccionamiento. Tanto es así, que el tema amenaza con convertirse en un cruce de acusaciones de cómo gestionar una concejalía de fiestas. El caso es que, por ejemplo, la portavoz de Ciudadanos, Amparo Picó, sí que se refirió a este tema asegurando que «la cantidad de contratos menores puede disminuirse sacando a concurso con tiempo eventos como el Correfira o las contrataciones de la Feria para actuar en los barrios y pedanías. Es un asunto que perfectamente puede salir a concurso pero ya van dos años que el concejal Fuset opta por el modelo de contrato menor para dar a dedo las contrataciones». También incluye en sus críticas que no se « saque a concurso con más antelación, es decir, en el primer trimestre de 2019, la infraestructura del montaje de los conciertos de Viveros», que la televisión autonómica no emitiera la Batalla de flores y que «no se adjudique el trabajo de los carroceros a 48 horas del festejo».

«Suspenso a la gestión»

A la espera de los datos económicos, Félix Crespo (PP) centra sus críticas en cuestiones de gestión. «Fuset, de manera autocomplaciente y sin ningún tipo de autocrítica, una vez más, vende una Feria de Julio y oculta otra, más vergonzante que refleja lo que está siendo su gestión en estos tres años de improvisación, despilfarro, y obviando trámites y requerimientos administrativos y legales». Y, sobre todo, una cuestión moral: «El resumen de esta edición lo plasmó de manera muy gráfica la máxima autoridad, el alcalde Ribó con su no asistencia. Ahí evidenció su nulo apoyo a la Feria de Julio y en particular a la Batalla de Flores. Fuset debería preocuparse por el vacío al que le está sometiendo su propio jefe de filas, que se interpreta como un suspenso a su gestión». La explicación a la ausencia del alcalde fue una lumbalgia. Lo cierto es que ayer canceló el único acto público que tenía en la agenda.