Los tinglados 4 y 5 del puerto de València, que alojaron en su día los boxes de la Fórmula 1, sufrieron luego un deterioro progresivo que llevó a que este mismo año un anteproyecto de restauración, realizado por el arquitecto Josep Vicent Lluch, indicara que presentaban «un riesgo severo de colapso», por lo que se aconsejaba una intervención urgente. Por tanto, a mediados de julio, el Consorcio València 2007 licitó, por 197.00 euros, la redacción de los proyectos de obra de los Tinglados 2, 4 y 5. Ahora, un mes después, los dos últimos aparecen cubiertos totalmente de plásticos negros, por lo que la reforma en los mismos es ya inminente.

Cabe matizar que estos tres antiguos almacenes portuarios están declarados como Bien de Relevancia Local. Además, su restauración estará cofinanciada con fondos europeos Feder, como así anunciaba en julio el ayuntamiento.

El Tinglado 5 se reconvertirá en espacio de usos culturales y creativos y el 4 se dedicará a espacios de trabajo e innovación. Recuperar los antiguos tinglados requiere un desembolso de más de dos millones de euros. En concreto, el anteproyecto barajaba una inversión de 897.000 euros para el tinglado 5; 995.600 para el tinglado 4 y 354.000 para el tinglado 2.

Los tinglados fueron construidos por los ingenieros José María Fuster y Fausto Elio en 1911 y son uno de los elementos destacados de la fachada de la dársena interior del puerto y actual Marina de València. El informe de patologías de los tinglados advertía de problemas de grietas y fisuras que atraviesan las estructuras de hierro y hormigón que representan un riesgo estructural evidente.