El nuevo Plan Especial del Cabanyal que presentó ayer el concejal de Desarrollo Urbano, Vicent Sarrià, incluye un edificio en altura de 17 plantas junto a la Marina de València. Será un nuevo hito en altura (otro más porque ya hay previsto un hotel en la Marina, junto a la Estación Marítima), que llenará uno de los numerosos vacíos urbanos existentes en el barrio. El hotel se incluye en la nueva unidad de ejecución de Eugenia Viñes, donde en época de Rita Barberá se proyectó un complejo de piscinas olímpicas y más tarde una villa termal (que nunca vieron la luz). Se trata de una pastilla de suelo casi en primera línea del mar, de gran interés para los promotores, donde se podrán construir casi 300 viviendas.

La versión preliminar del nuevo plan sin derribos, que sustituye al anterior de la prolongación de la avenida Blasco Ibáñez, contempla la construcción de mil viviendas, 700 de ellas en las nuevas unidades de ejecución (de las que un 60% serán de VPP) y 235 apartamentos dotacionales. A estas viviendas se sumarán otro centenar de propiedad municipal ya existentes en el barrio, cuya rehabilitación es una de las principales demandas de los vecinos, que se han rebelado contra el gobierno tripartito de corte progresista por el retraso en las medidas de regeneración social y urbanística del barrio. Uno de los objetivos del plan, del que se ha eliminado la reclasificación de zonas verdes que suscitó las críticas de los vecinos, es repoblar el barrio, ganar 2.000 vecinos más y situarse en niveles de población previos a la aprobación del PGOU.

El plan, redactado por los urbanistas Gerardo Roger y Luis Casado, aumenta las zonas verdes (manteniendo el parque de Doctor Lluch, como reivindicaron los vecinos tras conocerse que el primer borrador del plan reclasificaba una parte) y contempla la construcción de seis aparcamientos (cinco en altura), incluye soluciones vegetales para camuflar las medianeras y reserva suelo junto a Tarongers para dotaciones universitarias, de tipo formativo o residencial, dada la demanda de este tipo de suele existente en la zona por su cercanía al campus universitarios.

La primera teniente de alcalde y portavoz socialista, Sandra Gómez, aseguraba que el nuevo plan del Cabanyal será uno de los hitos de la legislatura que dotará al barrio del Cabanyal de una nueva hoja de ruta urbanística para la esperada regeneración del barrio. en El plan, comentaba Sarrià, es pionero en la obtención de suelo sin recurrir a las expropiaciones al delimitar nuevas unidades de ejecución. De los aprovechamientos urbanísticos se espera la obtención de seis millones de euros de plusvalías para el ayuntamiento que se reinvertirán en rehabilitar viviendas (más de un centenar en la «zona cero» y su entorno) y construir nuevas dotaciones. Uno de los problemas que no resuelve el documento es el de los bloques portuarios, cuyo destino (derribo o rehabilitación) sigue pendiente de varios informes (urbanístico, económico y social).