Una encuesta popular organizada a través de la página web Change.org ha sumado ya 2.500 votos en contra del carril bici de la avenida Reino de València, un proyecto que en el año 2016 fue aprobado a través de los presupuestos participativos con apenas 67 votos.
Aún siendo momentos, iniciativas, ámbitos y formas distintas, esta enorme diferencia de apoyos viene dar idea, al menos, de la volatilidad de estas iniciativas y de la falta de legitimidad de los proyectos aprobados en los presupuestos participativos, sobre todo aquellos que tienen un fuerte impacto en los barrios y en la ciudad en general, como han denunciado los vecinos.
En la iniciativa popular -hay otra de las mismas características que tiene otros 1.500 votos- se incluye un encabezamiento en el que se califica de «desastre» el carril bici de la avenida Reino de València.
Según los promotores de la votación, en esta importante arteria de la ciudad «se va a dejar solamente un carril para circular», un dato negativo si se tiene en cuenta que por esta avenida «circulan muchos autobuses de la EMT» y «se crearán grandes colapsos de tráfico».
«El aumento de los pitidos y del ruido generará un fuerte aumento de la contaminación acústica para los vecinos de la zona. Será incluso peligroso para las emergencias médicas y los bomberos. Y además, los vecinos no podrán parar ni tres minutos en segunda fila (ya que desaparecerá) para descargar maletas, ancianos o niños pequeños dormidos», explica la iniciativa.
Su propuesta, por tanto, es «hacer un carril bici por la zona ajardinada del centro de la avenida, donde no se perjudica al tráfico y es suficientemente amplia para convivir con los peatones», precisan los promotores de la votación.
