Los vecinos del barrio de la Luz y en menor medida los de la Fuensanta llevan semanas alarmados por la presencia de «clanes del Este» que recorren sus calles en busca de pisos para ocupar ilegalmente. Según dicen, ya hay varias viviendas ocupados por estos colectivos y ello se ha dejado notar en la venta de droga y en la delincuencia en general, hasta tal punto que ya lo han comunicado a la policía y preparan una reunión-asamblea el próximo 28 de septiembre.
Según comentan los vecinos del barrio de la Luz a través de las redes sociales, hay varios coches que circulan por sus calles en busca de pisos cerrados y personas que se quedan vigilando los inmuebles para ocuparlos si ven que no hay nadie. Al parecer, llevan niños y personas mayores para ocuparlos con la intención de permanecer al menos 48 horas y así evitar que los echen después sin una orden judicial.
Varios pisos ya han sido tomados por este sistema y además, según comentan los vecinos, sus ocupantes se dedican a robar y meter la mercancía a plena luz del día, teléfonos móviles entre otras cosas.
Esta situación, que tiene alerta a todo el barrio, ha llegado a tal punto que algunos pisos han sido ocupados sin estar «abandonados». Ayer mismo una propietaria tuvo que salir corriendo hasta su casa para expulsar a personas que ya se habían metido dentro sin su consentimiento. «Si los dejan quedarse luego ya no hay quien los tire», dicen los vecinos.
Para tratar de poner coto a esta situación, los afectados del barrio de la Luz ya han puesto denuncias en Xirivella y València y lo han comunicado a la policía, que se ha comprometido a incrementar la vigilancia.
Además, preparan asambleas para tomar decisiones conjuntas y, entre tanto, advierten por las redes sociales de que no abran la puerta a personas extrañas y avisen a la policía si ven algo raro. Creen que esta presión vecinal puede disuadirlos.
Tregua en la Fuensanta
Por lo que respecta al barrio de la Fuensanta, desde la Asociación de Vecinos aseguran que la situación es parecida, aunque destacan el hecho de que muchos pisos de este barrio colindante con el de la Luz ya estén ocupados por familias gitanas y hayan «mantenido a raya» a estos «clanes del este».
Aseguran en última instancia que la Policía Local de València está pasando más por la Fuensanta más que nunca y eso ha hecho que en los últimos días se haya calmado la situación, que, en cualquier caso, dista mucho de estar normalizada.
