Javier García Márquez acaba de ser elegido como presidente de la Asociación de Vecinos y Vecinas de Benimaclet. Tiene 66 años, está jubilado y es exfuncionario del Ayuntamiento de València. Nació en Canarias y es hijo de militar. Vive desde 1977 en València, y en Benimaclet desde 1989. Desde entonces es miembro de la asociación que tiene 400 socios. Tradicionalmente ha pertenecido al movimiento de Ampas tanto de educación primaria como en secundaria en el Padre Catalá y en el IES Ferrer i Guàrdia.
¿Cómo se ha concretado la renovación de la directiva de la asociación y cómo se ha organizado?
La junta directiva tiene 25 miembros, se ha renovado el 30 % de los componentes y el 40 % son mujeres. Además hemos creado equipos que se han estructurado en tres grupos: comunicación, bienestar social y urbanismo.
¿Cuáles son los ejes básicos de su programa para estos tres años?
Pues estamos centrados en el tema del PAI de Benimaclet, que es el más importante; estamos trabajando ya en la creación de un Observatorio Social para detectar todas las situaciones de personas en riesgo de pobreza y de exclusión social; y para ayudar a las personas mayores que viven solas,y en general, a todas las personas que precisan algún tipo de apoyo. Y también apoyamos el mercado ecológico Ecomaclet, que se celebra una vez al mes y apuesta por la agricultura ecológica y por los productos de proximidad. De hecho, hay un proyecto para crear otro mercado en Benimaclet ya que desapareció el que existía.
¿En qué situación está ese Observatorio Social al que se refería?
En estos momentos, estamos con un proyecto que ya se ha presentado a la concejala de servicios sociales y se está hablando con los técnicos del centro municipal de servicios sociales del barrio para incluir sus sugerencias. El objetivo es ayudar a los técnicos del centro municipal no ser un obstáculo para ellos y de ahí que queramos establecer estrategias conjuntas para hacer mejor la vida de las personas de nuestro barrio.
Ha hecho hincapié usted en las personas mayores, ¿les preocupa especialmente este colectivo
Sí nos preocupa porque en Benimaclet tenemos 1.599 personas que viven solas, con más de 64 años, sobre una población total de 29.000. De esos 1.599 mayores solitarios, la mayor parte, 1.233 son mujeres. Y de más de 79 años, sabemos que tenemos 675 mayores que viven solos de los que 543 son también mujeres. Por ende, el 21,7% de la población del barrio son mayores de 65 años, concretamente 6.238 vecinos. Sabemos que una gran parte de estos mayores que viven solos cuentan con el apoyo diario del centro municipal de servicios sociales pero hay otra parte que no sabemos en qué situación están. Por eso queremos que la gente del barrio, los vecinos puedan estar al tanto y ayudarlos en caso de que ocurra alguna situación de emergencia y siempre que lo deseen. De hecho, esta debería ser una de las funciones de este Observatorio Social del que hablábamos.
¿Cuáles son las infraestructuras que necesitan ustedes para el barrio?
Necesitamos una casa de cultura, un centro cultural para Benimaclet porque es una reivindicación histórica desde hace años y además es un barrio donde existe una gran efervescencia cultural y social. También necesitamos la escuela infantil, de 0 a 3 años, porque no existe ninguna pública en el barrio. Llevamos ya dos años presionando al colegio para que haya como poco un aula pero aún n0 exite y habría que dotarla si se aprobase en ese centro escolar. Luego también entendemos que hacen falta edificaciones de planta baja para las personas mayores, que se podrían construir en ese PAI de Benimaclet que promueve Metrovacesa.
¿Qué novedades hay sobre este PAI de Benimaclet?
Hemos conocido hace poco que en pocos días es posible que se constituya la Agrupación de Propietarios en torno a Metrovacesa, que tiene el 40 % del suelo. Como sabe, su proyecto pasar por construir 1.345 viviendas e incorpora una parte de las propuestas realizadas a través de Benimaclet és Futur. Por parte de la Asociación de Vecinos y de la plataforma Cuidem Benimaclet, que no estamos de acuerdo con el proyecto de Metrovacesa, podemos avanzar que en una semana se podrá presentar un estudio de la Universitat de València que ofrece básicamente dos alternativas. Una que va en la línea de que se puede reducir la edificabilidad en el PAI a la mitad de las 1.345 viviendas proyectadas y el proyecto sería viable y rentable. La segunda opción también incide, como quiere Cuidem Benimaclet, en que se puede desclasificar toda la zona y costaría incluso menos de los 20 millones que estimó un informe del propio consistorio.
¿Cómo está el problema de la suciedad en el barrio?
Creo que ha mejorado. Se puede mejorar más, pero ha mejorado. Además, en este problema hay que incidir mucho en la concienciación ciudadana porque el problema no depende solo de la administración.
¿Y el botellón?
Como sabe tuvimos una época de muchos problemas y ruidos con el botellón. Gracias a la mayor presencia policial se ha conseguido reducirlo, sin embargo es verdad que sigue habiendo botellón en verano con chicos jóvenes en la plaza de Benimaclet y eso genera quejas de los vecinos.
