El Ayuntamiento de València destinará 1.600.000 euros para una media estimada de entre 1.200 y 1.800 euros a los propietarios de establecimientos de hostelería en concepto de ayuda para subvencionar el sector, dentro de la batería de recursos económicos destinados a paliar los efectos de la epidemia de coronavirus en los sectores económicos.

En este caso se trata de ayudar a los propietarios de establecimientos correspondientes a los grupos económicos 671 (restaurantes), 672 (cdafeterías), 673 (cafés y bares con y sin comida), 675 (quioscos y barracas en mercados o plazas al aire libre) y 676 (chocolaterías, heladerías y horchaterías). Es una ayuda pensada para los pequeños negocios, a la que no tendrán acceso ni los grandes establecimientos ni las franquicias.

El objetivo de la ayuda, tal como señaló el presidente de la Federación de Hostelería, Manuel Espinar, es «que sirva para avanzar. Yo recomendaría que esa ayuda se destine a modernizar los establecimientos, que den el salto digital que es necesario ante la nueva normalidad», en alusión a programas de reservas on line, movimiento en redes sociales y posicionamiento de marca. «Yo no la destinaría a, por ejemplo, comprar stock, sino a prepararnos para el futuro. Nuestra entrada ya no es una puerta o un escaparate, sino el teléfono móvil y sus aplicaciones». Las empresas beneficiarias, que deben recibir la ayuda sobre el mes de octubre, deberán permanecer abiertas cuatro meses desde su recepción.

La concejala de Sectores Económicos, Pilar Bernabé, resaltó «que las bases de estas ayudas se han perfilado y concretado con el acuerdo de los agentes implicados, y conscientes de las necesidades y problemática del sector, que ha recibido un gran impacto económico con la crisis sanitaria. Son unas bases muy sencillas, fáciles de solicitar y acceder» y avanzó, sobre esa revolución tecnológica necesaria, que «habrá segunda fase en que apoyaremos a la hostelería para poner en marcha ideas innovadoras que favorezcan su negocio».

La cuantía no es suficiente como para salvar ningún negocio por si sola. «Es para impulsar el desarrollo del establecimiento» (la concejala del PP Paula Llobet lo calificó de ayer como de «una tirita insuficiente») y los hosteleros aseguran que debe ser una más de las necesarias. Así, Espinar ya avanzó que la siguiente petición será «que se exonere del pago de las tasas de terrazas de 2021» como medida para «aliviar la situación de un sector que no puede prever absolutamente nada de lo que le pueda pasar mañana mismo».