El ayuntamiento adjudicará hoy, cinco años después de la paralización del proyecto anterior, el contrato para remodelar integralmente el parque Manuel Granero, en el barrio de Russafa. Las obras, según anunció ayer el concejal de Ecología Urbana y vicealcalde, Sergi Campillo, podrían arrancar durante el primer trimestre de 2021. «Pondremos fin así a una necesidad largamente reivindicada por el vecindario del barrio, que ahora por fin podrá disponer de un proyecto muy atractivo y complejo, con una zona ajardinada renovada que es fruto de un proceso de participación ejemplar iniciado en el mandato anterior y que demuestra la voluntad de mediación y diálogo del gobierno municipal con las entidades vecinales, con las que nos reuniremos próximamente para explicarles el calendario previsto», subrayó el vicealcalde.

El proyecto, que afectará a una superficie total de 7.500 metros cuadrados, se adjudicará finalmente a la Compañía Levantina de Edificación y Obras Públicas, (Cleop) por un importe final de 464.400 euros, el doble de lo que se presupuestó para el proyecto aprobado en 2015 por el anterior gobierno del PP.

Las obras se iniciarán a principios de año, respondiendo así a la voluntad del gobierno municipal de que la reforma se pueda acometer durante el año natural.

«Estamos muy satisfechos por poder dar respuesta a una reivindicación histórica del vecindario de Russafa y resolver toda una serie de problemas detectados», explicó Campillo. Como ejemplo, citó la eliminación de barreras y la mejora de la accesibilidad, con la instalación de jardineras elevadas y setos para definir claramente el espacio del jardín de la acera del entorno. Además, se eliminarán elementos no utilizados por el vecindario del barrio. Por otro lado, el espacio contará con un nuevo espacio de estancia y de interacción intergeneracional además de las zonas de juegos infantiles y de socialización de perros. Varias conexiones transversales unirán los diferentes cuadrantes ya existentes.

El arbolado existente se conservará en el proyecto de remodelación integral, que contempla una renovación del estrato arbustivo y del tapizado, así como del sistema de recogida de aguas pluviales. «El objetivo es mejorar las condiciones ambientales de esta zona ajardinada, como parte del ecosistema urbano», añadió el vicealcalde.

El suelo del jardín se mejorará, con más tierra para el arbolado que hay en la terraza elevada, y se pondrán alcorques para facilitar el mantenimiento; también habrá un nuevo sistema de drenaje sostenible para todo el jardín, con el objetivo de retornar al subsuelo toda el agua de lluvia que recoge el ámbito de actuación.