El Racó de l’Olla ya es la mayor colonia de gaviota cabecinegra (Larus melanocephalus) de la Península Ibérica y una de las mayores colonias mundiales con 1379 parejas, una cifra que duplica la existente en 2020, que era de 690 parejas. Así se recoge en el censo de aves nidificantes que el servicio municipal de Devesa-Albufera ha realizado en este espacio del parque natural. La gaviota cabecinegra es un pájaro marino de pequeño tamaño con plumas de colores que varían en función de la edad del ejemplar. Su elemento más característico es la caperuza negra que luce en la época reproductora. Está presente en los humedales mediterráneos y de la Mancha.

La población de la especie no ha dejado de crecer desde 2001. El éxito de la implantación de esta colonia radica, según los expertos, en la capacidad de la especie para explotar los recursos disponibles en el perímetro de huertas del parque natural. Por su parte, tres parejas de cerceta pardilla (Marmaronetta angustirostris) han conseguido reproducirse este año en el Rincón. La cerceta pardilla es la anátida más amenazada de Europa y, en los últimos años, solo se había podido detectar la reproducción de una o dos parejas de aves. Estos animales miden unos 40 centímetros de largo y pesan unos 500 gramos. Tienen el cuello y el pico largo y un plumaje de color terroso con manchas claras. Vive en las lagunas dulces o salobres y se alimenta de insectos, moluscos y plantas acuáticas. La cerceta está catalogada como especie en peligro de extinción en España y solo quedan unas decenas de parejas en toda Europa. El vicealcalde Sergi Campillo subraya que el Racó de l’Olla «nos continúa demostrando su capital importancia para la conservación de aves marinas y de la biodiversidad».