El Palacio de Congresos de València está de renovación. El presupuesto del Ayuntamiento de València de 2022 incluye una partida de 1,8 millones de euros para el cambio de las 2.000 butacas y la moqueta de los dos auditorios del edificio diseñado por Norman Foster y reconocido en varias ocasiones como Mejor Palacio de Congresos del Mundo.
Una inversión que llevaba tiempo en la lista de peticiones de los responsables del palacio, que la califican de «perentoria» porque, aseguran, «las actuales butacas y moquetas han quedado obsoletas» y «están muy deterioradas» por el uso intensivo del edificio y sus más de dos décadas en funcionamiento. La inversión, sin embargo, tuvo que aplazarse por la crisis del coronavirus.
La renovación de las butacas, que finalmente se llevará a cabo en el verano de 2022, aprovechando el cierre por vacaciones, dispara en un 70% el presupuesto de 2022 del Palacio de Congresos, entidad pública empresarial del Ayuntamiento de València. El presupuesto del palacio asciende en global a 5,9 millones de euros, frente a los 3,5 millones del actual ejercicio.
Asientos para ocho horas
Los responsables del Palacio de Congresos ya han aprobado los pliegos para la contratación del suministro e instalación de las nuevas butacas y la moqueta de los auditorios, que incluirá también la renovación del sistema de iluminación de recorridos. «La calidad de las butacas ha permitido su uso durante 23 años, dando una excelente imagen, con las más altas prestaciones durante este periodo», explica la memoria de los pliegos de licitación. «Debido al desgaste por el uso prolongado» el recinto «necesita perentoriamente proceder a la inversión objeto de esta propuesta», añaden. Las butacas y moqueta de los auditorios han soportado el paso de 3.000 eventos y más de dos millones de personas durante el tiempo que lleva funcionando, «siendo necesaria su sustitución», insiste la memoria, que argumenta que «derivado del uso principal como espacio para congresos, las butacas tienen que soportar sesiones largas, de hasta ocho horas de duración». Por lo tanto, «es básico que proporcionen comodidad y confort, facilitando en los asistentes una actitud de escucha activa y una funcionalidad versátil para distintas configuraciones», expone la memoria.
Un 30% más de ingresos
Aunque el incremento del presupuesto del Palacio de Congresos se debe en gran medida a la transferencia para cambiar las butacas, también obedece a los mayores ingresos previstos por la actividad congresual, de restauración y de producción de electricidad (el edificio de estética industrial tiene placas solares en la cubierta), principalmente, que ascienden a 3,4 millones de euros, casi un 30% más que el actual ejercicio.
Las transferencias corrientes al palacio de Congresos están presupuestadas en 400.000 euros, destinados a hacer frente al déficit de explotación previsto en el 2022, lo que supone una reducción del 25,3 % en relación a 2021. Los gastos de personal del Palacio de Congresos aumentarán un 4% respecto al año anterior, situándose en 1,2 millones, lo que representa un 21,5 % de los gastos totales. El gasto corriente también aumentará al pasar de 2,1 millones de euros consignados para 2021 a 2,7 millones de euros para 2022, casi un 30 % de aumento respecto al año anterior.
La renovación de las butacas llega después de un año sin inversiones en el que se llevó a cabo la eliminación de las fuentes y sus sustitución por jardineras y una explanada de césped, una intervención incluida en los presupuestos de 2020 y ya terminada que ha dado un cambio importante al exterior del edificio. El recinto ha ganado una nueva zona verde de 1.400 metros cuadrados que sustituye a las fuentes y albercas que habían provocado daños por filtraciones en muros y pilares del edificio. Las obras para eliminar las fuentes y láminas de agua costaron 100.000 euros y se llevaron a cabo aprovechando el cierre del recinto durante las vacaciones estivales.
