El presidente de la Autoridad Portuaria de València, Aurelio Martínez, ha explicado que el origen de los elevados niveles de ácido sulfhídrico en la red municipal de alcantarillado no fueron por vertidos, sino por un problema de la propia instalación por falta de aireación y al respecto ha explicado que ya han adquirido bombas para oxigenar el sistema que han solucionado el problema.
Martínez, en rueda de prensa posterior al Consejo de Administración, se ha referido así a la multa que le impuso el Ayuntamiento de València por los niveles de esta sustancia.
Al respecto, ha explicado que el Puerto cuenta con una red propia de conectores en coordinación con la concejalía del Ciclo Integral del Agua y cuando "surgieron los primeros síntomas se estudió dónde estaba el problema". Así, el pasado mes de noviembre se establecieron medidas correctoras y se dio por cerrada la incidencia. Sin embargo, a los pocos días volvieron a aparecer. De este modo, las actuaciones ejecutadas daban resultados a corto plazo, pero las mediciones diarias demostraban que volvían a aparecer.
Por ello, se revisó toda la red de saneamiento y se comprobó que el problema estaba "en el propia instalación ya que al no tener mucha pendiente había residuos que, cuando había parálisis en el bombeo, se acumulaban en un determinado emplazamiento y cuando se descomponían originaban los problemas de ácido sulfhídrico". El último episodio fue cuando el equipo que inyectaba oxígeno se quemó. El Puerto ya lo ha sustituido y se van a adquirir otros dos bombas para garantizar un sistema redundante. Por tanto, ha destacado que ya "no se repite problema" y se ha descartado que sea necesaria una depuradora porque la depuración se hace en origen antes de entrar en la red.
