Los representantes de las distintas asociaciones de vecinos han tomado el hemiciclo municipal del Ayuntamiento de València en una imagen histórica y llena de simbolismo, que sirvió para inaugurar la 30ª Semana Ciudadana, que se celebrará en los próximos días en los distintos barrios de la ciudad.
La presidenta de la Federación de Asociaciones de Vecinos María José Broseta, -escoltada por el alcalde Joan Ribó y la concejala de Participación Ciudadana Elisa Valía-, afeó a los políticos que no cumplan sus promesas y les pidió que no tutelen a la ciudadanía sino que la escuchen. Fue una intervención cargada de mensaje ahora que la campaña preelectoral se puede dar por iniciada con vistas a las municipales de 2023.
«Los programas electorales -ha dicho Broseta- son muy bonitos sobre el papel. Pero basta caminar por la ciudad o mirar dentro de las casas de los vecinos para comprobar que estos programas electorales no suelen coincidir con la realidad de la ciudad».
La líder vecinal advirtió a los políticos «que no deben pensar por la ciudadanía» pues esta «sabe pensar por sí sola», sino más bien tienen que aprender a escucharla porque «el movimiento vecinal hace política pero no partidista».
La presidenta de la federación resaltó que el movimiento vecinal de València «es cada vez más fuerte y más vivo», y recordó que el lema de esta 30 jornada recién inaugurada es: «movimiento vecinal, ojos de la ciudad».
No en vano, recordó que València es el resultado «de grandes conquistas» de los vecinos como la propia Democracia, los 35 años del Cauce del Turia o El Saler para el pueblo. En esa línea, señaló que los colectivos vecinales estarán vigilantes «para que haya más servicios públicos en los barrios periféricos y en el centro» y para mejorar «la movilidad, la poda, la limpieza, los servicios sociales, la seguridad ciudadana, y el uso y el abuso del espacio público». También para garantizar el acceso a la vivienda digna, de jóvenes y mayores.
Por su parte, el alcalde Joan Ribó destacó que efectivamente «el movimiento vecinal son los ojos de la ciudad, y también la voz». Estas entidades cívicas, añadió, «son la mirada con la que los gobiernos tenemos que contar para entender la ciudad». Por todo ello, «ahora más que nunca se hace necesaria la colaboración entre ayuntamiento y entidades vecinales».
El alcalde calificó de «una gran noticia» que después de los duros años de la pandemia se pueda volver a celebrar la 30 Semana Ciudadana, que es un evento «fundamental para poner en valor el trabajo de las entidadces sociales».
Por último, la concejala de Participación Ciudadana Elisa Valía remarcó que el modelo de este gobierno municipal pasa por llevar servicios e inversiones a todos los distritos y pedanías: «Que todos los barrios tengan su propia plaza del Ayuntamiento».
Para Valía, los problemas del vecindario «se resuelven yendo de la mano la administración pública y las asociaciones». Por ello, destacó que por primera vez «coorganizamos esta 30 Semana Ciudadana entre ayuntamiento y federación de vecinos» porque es fundamental «visibiizar el trabajo que realizan las entidades vecinales en los distintos barrios» de València.
Por último, subrayó «el carácter combativo y reivindicativo» del movimiento vecinal aunque «con espíritu constructivo» y «vocación de transversalidad» para tratar de resolver los problemas.