Un monolito situado en el pasillo central de la Sección 19 del Cementerio General de València recuerda y homenajea desde este martes a los valencianos que fueron víctimas del holocausto nazi en distintos campos de concentración a los que fueron llevados por sus ideas o creencias religiosas.

De este modo, como recoge la inscripción situada junto a esta imagen, se pretende desde el Ayuntamiento de València recordar "a todas las personas" de esta ciudad "que padecieron en los campos de concentración y exterminio nazis".

"Las vivencias y el sufrimiento que allí padecieron nuestros vecinos fue inhumano. Por eso, con esta obra, queremos rendir homenaje y mostrar todo nuestro respeto a las víctimas que tuvieron la desgracia de padecer uno de los momentos más oscuros de la historia", recoge ese texto.

El consistorio reconoce así a los 53 valencianos, hombres y mujeres que nacieron en la capital valenciana o que vivieron en ella, que tras ser deportados a campos de concentración nazis como Gusen, Krems, Hartheim, Mauthausen, Auschwitz, Buchenwald, Dachau o Peschanka fueron asesinados o desaparecieron.

El alcalde de València, Joan Ribó, junto al concejal de Cementerios, Alejandro Ramón, ha presidido y ha participado en el acto en el que ha sido descubierto el monolito y se ha homenajeado a estos valencianos con distintos discursos que han evocado su memoria y sufrimiento.

En la convocatoria han intervenido también la doctora en Ciencias de la Información Estrella Israel, miembro de la Junta Directiva de la Comunidad Israelita de València; y el delegado de la Asociación Amical de Mauthausen en la Comunitat Valenciana, Adrián Mínguez.

Al homenaje han asistido otros ediles como la titular de Educación, Cooperación y Migración, Maite Ibáñez; la concejala del PP Marta Torrado; y el concejal de Cs Javier Copoví, así como representes del Grupo para la Recuperación de la Memoria Histórica y de la Federación de Asociaciones de Vecinos de València.

Joan Ribó ha instado a "no olvidar a las personas que perdieron la vida defendiendo la libertad frente a la muerte y el horror" y ha exigido "justicia y memoria para las víctimas", además de señalar que tanto las generaciones actuales como las siguientes deben tenerlas "siempre" presentes.

"Es un recuerdo para mí muy importante que se debe resaltar. Ha habido en este país una gran tendencia a esconder lo que pasó una vez se acabó la Guerra Civil y durante los años posteriores, en la Segunda Guerra Mundial y en los campos de concentración. Me parece muy importante recordarlo", ha expuesto el responsable municipal.

Así, ha subrayado que se debe "recordar para no repetir la historia", al tiempo que ha precisado que el monolito recuerda a valencianos que "tuvieron que salir de València por la Guerra Civil, que fueron apresados en Francia y trasladados a campos de concentración nazis donde muchos murieron".

La imagen, de dos metros de altura, está hecho de ladrillos de adobe compuestos de paja de arroz y tierra con la intención de que vaya erosionándose y que con el paso del tiempo se tenga que reconstruir. De este modo, se volverá a honrar a las víctimas del holocausto.

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Simbolismo

Ribó ha destacado "el simbolismo del monolito, que no es eterno por no estar hecho de mármol o de piedra" sino de "un material que con el tiempo se deshace" y ha apuntado que esto quiere decir que "la memoria se va perdiendo con el tiempo" y que "la tenemos que conservar". "Tenemos que reconstruir la memoria para recordar y no repetir", ha insistido.

Por su parte, Alejandro Ramon ha agregado respecto al material con que se ha hecho la figura homenaje que se ha confeccionado "con técnicas locales y materiales próximos" y con la idea de que "con las lluvias, el viento y los diversos fenómenos meteorológicos se vaya deformando progresivamente" como "se degrada la memoria y se van olvidando algunos recuerdos".

El concejal ha afirmado, como Ribó, que esto hará que "las generaciones posteriores tengan la responsabilidad de reconstruir esta conmemoración". "De ellas dependerá volver a hacer el ejercicio de recuerdo y memoria colectiva para no olvidar el dolor, el odio y el holocausto que asoló Europa", ha declarado.

El alcalde ha manifestado que "los campos de concentración fueron la culminación de toda una maquinaria de tortura y terror que el régimen nazi sembró en Europa entre 1933 y 1945" y ha resaltado "entre toda esta red de muerte e infamia" el de Mauthausen-Gusen, conocido como el campo de los españoles.

Allí se trasladaron a 7.532 exiliados españoles que habían pasado a Francia en 1939 después de la victoria del bando franquista en la Guerra Civil y que fueron detenidos cuando el régimen nazi tomó Francia.

Joan Ribó ha expuesto que el 59 por ciento de los españoles llevados a Mathausen "no salieron nunca de allí" y que "murieron lejos de su casa, víctimas de la crueldad del nazismo y del colaboracionismo del dictador Franco". Ha apuntado que este último "los pudo salvar y no quiso por considerarlos traidores", ha lamentado que así se les condenó a "una terrible muerte" y ha censurado que "durante décadas" quedaron en "el olvido de las instituciones públicas".

El primer edil ha explicado que la iniciativa de instalar un monolito como este en el Cementerio General de València se enmarca dentro de las actuaciones del Ayuntamiento de la ciudad "para dignificar a las víctimas del franquismo y de la guerra". Ha recordado que estas se iniciaron en 2015 con la exhumación de los restos de Teófilo Alcorisa, uno de los represaliados del franquismo enterrado en una fosa común.

Un deber de memoria

Estrella Israel ha dicho que el de este martes ha sido no solo un homenaje sino un acto para "activar la memoria". Ha señalado que "recordar a los valencianos que murieron en los campos nazis y a todas las víctimas es un deber de memoria" y una forma de "denunciar todas las formas de exclusión, racismo y antisemitismo". "No son números, son nombres y personas recordándonos que lo peor siempre es posible", ha destacado.

Adrián Mínguez ha detallado que de los 88 valencianos llegados a los campos nazis --republicanos y judías, ha apuntado--, 53 fueron asesinados o desaparecieron en espacios donde "la vida no significaba nada".