"La Mataobras" ya ha reclamado al ayuntamiento que inspeccione 90 obras en apenas un mes

La plataforma ciudadana denominada "La Mataobras" ya ha notificado al Ayuntamiento de València casi un centenar de obras en bajos comerciales de la ciudad donde se están haciendo reformas que son susceptibles de ser ilegales, para que proceda a inspeccionarlas y determine si realmente tienen los permisos correspondientes para transformar estas plantas bajas y si tienen autorización para realizar la actividad turística. En apenas un mes, desde el 6 de noviembre, la vecina que promueve este foro cívico ha pedido por registro de entrada que el consistorio efectúe inspecciones en cerca de 90 obras en bajos comerciales en barrios como Orriols, Poblados Marítimos, Patraix, la Saïdia o Ciutat Vella. Son vecinos, particulares y anónimos, de los distintos barrios de València, los que le comunican que se están haciendo este tipo de reformas en bajos comerciales. "No todas estas obras son ilegales, puede ser que lo sean o no; o puede ser que tengan permisos de obras que no se corresponden con el objeto verdadero de la reforma que es una irregularidad bastante frecuente; o puede ocurrir que estén acabados, y ya funcionan como piso turístico pero no tienen licencia de actividad para ello o, por ejemplo, no se ha hecho el cambio de uso comercial a residencia en el bajo en cuestión". Son palabras de esta ciudadana que impulsa este foro cívico de denuncia en una conocida red social y que explica cuáles son las presuntas irregularidades que se están cometiendo en estas reformas efectuadas en inmuebles sitos a pie de calle.

Recibe dos y tres denuncias al día

La problemática que ha puesto sobre la mesa esta mujer está tan generalizada en València que cada día recibe dos o tres denuncias de posibles obras ilegales en bajos comerciales que se van a convertir en apartamentos turísticos. La Mataobras exige al nuevo gobierno municipal liderado por la alcaldesa María José Catalá que se dicte una moratoria y que no se den más licencias para construir y abrir alojamientos turísticos, pero además, reclama que haya un control e inspecciones para ver si efectivamente se cumple la normativa urbanística en este tipo de edificaciones transformadas. De hecho, propone que se fije un tope de viviendas turísticas máximo en cada barrio de la ciudad, en particular, en los más masificados, ya que entiende que este tipo de alojamientos encarecen el mercado de la vivienda y favorecen la gentrificación en los barrios.

Compromís reclama un plan de inspecciones de los apartamentos turísticos

En esta línea, la portavoz de Compromís en el Ayuntamiento de València Papi Robles ha puesto el foco "en la alarma social que está creándose en València ante la retirada de viviendas del mercado ordinario así como por la creciente transformación de bajos comerciales en apartamentos turísticos que está provocando el cierre de comercios en activo, un fenómeno que llega ya a casi todos los barrios de la ciudad, cuya intensidad destaca durante los últimos meses en aquellos adyacentes a los distritos ya saturados, de Ciutat Vella y Poblats Marítims".

Ante esta situación, Robles ha presentado una moción a la Comisión de Urbanismo, en la que da visibilidad a la plataforma ciudadana de "La Mataobras", que como publicó Levante-EMV, "se dedica a recopilar información que le envían los vecinos y vecinas sobre obras que presuntamente se están haciendo de forma ilegal, para adecuar bajos comerciales en toda la ciudad como apartamentos turísticos". Con esta información, ya han presentado 90 denuncias por registro de entrada en el ayuntamiento para que revise si se ha concedido licencia de obra o, si está ya terminado, si tienen licencia de actividad para desarrollar la actividad de alojamiento turístico.

Así, Robles solicita que el gobierno municipal tramite “de forma inmediata” estas denuncias y pide que se ponga en marcha "con la mayor celeridad un plan de inspección sobre las viviendas de uso turístico que están en funcionamiento en València, a fin de de garantizar que todas cumplen los requisitos legales que establece la normativa municipal y autonómica, y que tramite las sanciones de aquellas viviendas que vulneren la normativa".

Papi Robles ha exigido a Catalá que tramite estas denuncias y le ha recordado la importancia que tiene vigilar el cumplimiento de las leyes y ordenanzas municipales que, en el caso de las viviendas turísticas ilegales, suponen no sólo una infracción, sino que ponen en riesgo y vulneran el cumplimiento del derecho a la vivienda.

“El gobierno de Catalá y Vox no está asumiendo su responsabilidad y está dejando de lado al vecindario por intereses especulativos y partidistas. València debe ser una ciudad para vivir que apueste por viviendas asequibles y un comercio de barrio. Por ello, le exigimos a la alcaldesa que trabaje y ponga en marcha de forma urgente un plan de inspección sobre aquellas viviendas de uso turístico para garantizar que cumplen los requisitos legales y proceda a sancionar a aquellas que los vulneran. También apostamos por crear una unidad de policía turística que se dedique, entre otras cuestiones, a realizar estas inspecciones de apartamentos ilegales”.