Un acto escolar sustituye la lectura pública de la Constitución
La convocatoria escolar estuvo secundada por la alcaldesa y concejales de todos los colores políticos
La oposición crítica la ausencia del acto del día 6 porque es "para hacer puente"
Un acto blanco, de corte infantil, ha servido de revestimiento para la celebración del Día de la Constitución. Pero también ha servido para que gobierno y oposición, que han estado presentes en el mismo, diriman sus diferencias. La oposición ha cargado contra el equipo de gobierno, no por el acto celebrado, sino por el no celebrado. En condiciones normales, el día 6 se tenía que haber celebrado una lectura de la Constitución en el Salón de Plenos. Pero éste está sellado y lleno de andamios. Como sustitutivo de ha organizado el acto infantil en el Salón de Cristal. De hecho, así lo ha anunciado la propia alcaldesa.
En el acto han participado 140 estudiantes de los colegios municipales Benimaclet, Fernando de los Ríos y Santiago Grisolía. Niños y niñas de sexto de Primaria han realizado una exposición inicial sobre qué es la Constitución Española; seguido de un intercambio de preguntas y respuestas coordinado entre los tres centros, en el que los escolares se han preguntado y contestado sobre artículos que hablan de derechos y libertades y también han realizado preguntas a la alcaldesa sobre el funcionamiento del consistorio, el cargo de alcaldesa, la ubicación de la Virgen de los Desamparados en el Salón de Cristal, vivir en València o el cambio climático.
Estuvieron en el acto representantes de los cuatro partidos municipales. Joan Ribó, como cara más reconocible para algunos -no todos- hasta firmó autógrafos.
Pero para la oposición, este acto era una excusa para cerrar en festivo. La portavoz de Compromís, Papi Robles, fue la primera en mostrar sus críticas: «A Catalá se le llena la boca de hablar de la Constitución pero es sólo postureo y cinismo. Ni se cree la Constitución ni los derechos fundamentales que proclama. Cuando realmente llega el momento de su conmemoración, el 6 de diciembre, la alcaldesa prefiere hacer puente y no celebrar el tradicional acto de lectura pública de la Constitución que se hace en el Ayuntamiento». Y apela a que el mismo «lo instauró el gobierno de Joan Ribó y fue un acuerdo plenario por unanimidad de todos los grupos municipales en el 2017 por el que se aprobó su convocatoria todos los años». Como queda dicho, el hemiciclo está cerrado «pero podía haberse celebrado perfectamente en el Salón de Cristal».
El Partido Socialista estuvo presente en el acto con Maite Ibáñez, pero simultáneamente otros ediles acudían al ayuntamiento y, entre ellos, Borja Sanjuan que, casi de forma telegráfica, coincidía en términos parecidos de «en lugar de hacer el acto en otro sitio, prefieren irse de puente».
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