El gobierno municipal deja en el limbo el Centro de Alimentación Sostenible

El Centro Mundial de València para la Alimentación Urbana Sostenible (Cemas) lleva 7 meses sin dirección política ni técnica desde que el 1 de noviembre de 2023 se acabó el contrato del anterior gerente, Vicente Domingo, y no se ha nombrado a ningún sustituto desde entonces. De hecho, cuando se produjo el cambio de gobierno municipal, tras las elecciones de mayo del año pasado, ya había serias dudas de que el gobierno del PP, presidido por María José Catalá, fuera a darle continuidad a este organismo, convertido en fundación durante el pasado mandato. De hecho, tampoco es bien visto por Vox, que se integró en el gobierno local en octubre y que en su época en la oposición lo calificó como uno de «los chiringuitos» del Ayuntamiento de València que había que extinguir.

El 4 de abril se celebró la primera reunión auténticamente operativa del Patronato de la Fundación Municipal Cemas, y en ella se constató que un año después de certificarse el cambio de ciclo en el Ayuntamiento de València, ni populares ni voxistas tienen una hoja de ruta para el Cemas, cuya sede está en La Base de La Marina de València y fue inaugurada por la reina Doña Letizia el 22 de julio de 2019.

Aquel acto contó con la presencia de los máximos responsables de la FAO y representantes de los gobiernos nacional y autonómico, y se produjo tras defender ante la Asamblea de la ONU en febrero de 2019 el entonces alcalde Joan Ribó el papel de este centro internacional de referencia para desarrollar e investigar políticas pioneras que eviten el desperdicio alimentario y que potencien la alimentación sostenible. Todo ello vinculado a la Huerta de València, cuyo regadío histórico fue declarado en noviembre de 2020 como Sistema Importante del Patrimonio Agrícola Mundial por la ONU. Sin embargo, tal como consta en el acta del patronato del 4 de abril, «desde que finalizó el contrato de alta dirección con el anterior director, el 1 de noviembre de 2023, ese cargo no se ha cubierto, por lo que ha sido el propio presidente quien ha tenido que tomar alguna decisión de gestión para el desarrollo normal de las funciones del Cemas». Por tanto, «y debido a que el 31 de diciembre de 2023 finalizaban los contratos menores suscritos por el Cemas, se consideró que la mejor opción para poder continuar con el normal funcionamiento de la Fundación era adjudicar dos contratos menores puente para poder mantener los servicios de mantenimiento informático y de asesoría fiscal-contable, asesoramiento en gestión laboral y jurídica del Cemas por un período de 6 meses más y con el mismo valor estimado que los contratos que los preceden, es decir, 12.600 euros y 6.171 euros respectivamente».

De esta forma, la fundación ha podido continuar su funcionamiento en el día a día, pero los trabajadores adscritos al organismo no tienen ahora a nadie que pueda marcarles los objetivos.

El nuevo presidente de la entidad, desde principios del mandato, es el concejal del PP Carlos Mundina. Por ello, ante este vacío de poder en el área técnica, ha tenido que firmar varios documentos necesarios para poder justificar una solicitud de subvención a la Diputación de Valencia por valor de 56.670 euros. En este sentido, ha suscrito la relación de gastos, la relación de gastos e ingresos y la memoria justificativa y económica. En la reunión de abril se ratificó la gestión realizada por Mundina por todos los consejeros, con el voto a favor de PP, Vox e incluso de Joan Ribó, ya exalcalde de Compromís, y la sola abstención de la regidora socialista Elisa Valía. Ribó presidió el Cemas hasta las municipales y a primeros de abril aún ejerció como patrono porque no había oficializado su renuncia al acta de concejal, que se concretó a finales del mes pasado.

Por su parte, la concejala socialista Elisa Valía preguntó en ese patronato por las previsiones del nombramiento del nuevo director y si se va a hacer un proceso de selección para cubrirlo. El presidente Carlos Mundina indicó, tal como consta en el acta de la reunión, «que no puede facilitar fechas pero no hay una decisión sobre perfiles o personas y sobre el procedimiento».

Demanda del anterior gerente

Pero no solo no se ha producido un relevo en la gerencia del Cemas, lo que ha instalado a esta entidad en una parálisis, sino que además la destitución de Vicente Domingo ha sido traumática, pues el propio afectado presentó una demanda en el Servicio de mediación, arbitraje y conciliación de la Generalitat Valenciana por entender que su despido fue improcedente y para reclamar la indemnización que le corresponde.

Una vez celebrado el acto de conciliación sin éxito el pasado 2 de febrero de 2024, el interesado puede acudir ahora a la justicia laboral ordinaria.

La concejala y patrona del Cemas Elisa València, del PSPV-PSOE, denuncia «la desidia absoluta y la parálisis en la que el PP tiene sumido a este centro de referencia mundial, que no tiene director desde el pasado 1 de noviembre de 2023». «El desinterés es tal -afirma Valía-, que preguntado el presidente por si tienen intención de incorporar a un director nuevo antes de verano, para intentar aprovechar el potencial de este centro financiado con recursos públicos en el marco de la Capital Verde Europea, reconoce que ni sabe cuándo se incorporará, ni sabe qué perfil buscan, ni tampoco sabe si van a hacer un proceso de selección, o simplemente nombrarán a dedo a alguien con quien tenga afinidad».

Para Valía, «esto es un ejemplo más de la desgana que muestra el gobierno de Catalá con todo lo que no es dar espacio para los coches, que es prácticamente lo único en lo que se está empleando a fondo desde que llegó a la alcaldía». «Por incapacidad y desidia, -añade la munícipe- la ciudad de València está perdiendo un tiempo valiosísimo para desarrollar las herramientas que nos permitan afrontar los retos del cambio climático con más garantías». Aunque en Vox sean negacionistas, afeó la regidora socialista al PP, «a estas alturas, ya sabemos que la mayor negacionista es la alcaldesa, que pretende que la Capitalidad pase sin pena ni gloria, completamente desapercibida, porque trabaja para ocultarla, en lugar de trabajar para celebrarla», concluyó.

Valía denuncia «la desidia absoluta» del PP con esta fundación

La concejala y patrona del Cemas Elisa València, del PSPV-PSOE, denuncia «la desidia absoluta y la parálisis en la que el PP tiene sumido a este centro de referencia mundial, que no tiene director desde el pasado 1 de noviembre de 2023». «El desinterés es tal -afirma Valía-, que preguntado el presidente por si tienen intención de incorporar a un director nuevo antes de verano, para intentar aprovechar el potencial de este centro financiado con recursos públicos en el marco de la Capital Verde Europea, reconoce que ni sabe cuándo se incorporará, ni sabe qué perfil buscan, ni tampoco sabe si van a hacer un proceso de selección, o simplemente nombrarán a dedo a alguien con quien tenga afinidad».

Para Valía, «esto es un ejemplo más de la desgana que muestra el gobierno de Catalá con todo lo que no es dar espacio para los coches, que es prácticamente lo único en lo que se está empleando a fondo desde que llegó a la alcaldía». «Por incapacidad y desidia, -añade la munícipe- la ciudad de València está perdiendo un tiempo valiosísimo para desarrollar las herramientas que nos permitan afrontar los retos del cambio climático con más garantías». Aunque en Vox sean negacionistas, afeó la regidora socialista al PP, «a estas alturas, ya sabemos que la mayor negacionista es la alcaldesa, que pretende que la Capitalidad pase sin pena ni gloria, completamente desapercibida, porque trabaja para ocultarla, en lugar de trabajar para celebrarla», concluyó.

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