El equipo de búsqueda que intenta localizar el cuerpo de Marta Calvo en un pozo abandonado en Senyera ya ha introducido la cámara en el interior del sondeo en desuso para comenzar los trabajos de inspección.
Se trata de un poco de unos 60 metros de profundidad a la entrada de la localidad de Senyera. Los responsables de la Guardia CIvil explicaron que el pozo, ubicado dentro de una caseta, ya que está en desuso desde hace más de 7 años, no fue sellado hasta hace un par de años. Por ello, creen que en noviembre de 2019, el presunto asesino de Marta Calvo podría haber arrojado el cuerpo de la joven en el interior del hoyo dada la facilidad de acceso.
En la operación participan agentes del Grupo Especial de Actividades Subacuáticas (GEAS) de la Guardia Civil y del Grupo de Rescate e Intervención en Montaña (GREIM), responsables de la estrategia de análisis y descenso del pozo.
En el caso de que la inspección del pozo no dé resultados, los agentes tienen previsto revisar el resto de los puntos fijados ayer en ese tramo de carretera, entre ellos una casa abandonada, cañares, acequias y parte de los arcenes, completamente comidos por zarzas y otros arbustos especialmente densos.
