Si no se encuentra pronto un tratamiento combativo y eficaz contra la yesca, cientos de miles de vides están en peligro.

Hace unos años estaba autorizado el arsenito sódico, que fue lo más eficaz que se ha utilizado en el campo para tratar las vides afectadas por este hongo, que afecta a la madera. Pero su utilización se prohibió en España en 2003, no así en otros países europeos, que sigue siendo legal, por considerarse un producto cancerígeno. Desde entonces, los laboratorios no han dado con la fórmula de un producto eficaz para combatir la yesca.

Tractor cargado con cepas infectadas de yesca.

La yesca es un hongo que seca la planta. El problema es que se expande con mucha facilidad. No basta con arrancar las cepas infectadas , quemar los restos de poda o limpiar las tijeras.

Las variedades de uva más sensibles a este hongo son la tempranillo, la monastrell y la syrah. Pero también se aprecia en otras variedades.

La enfermedad afecta de una manera contundente. Puedes ver un día una cepa vigorosa y sana, y a la semana siguiente, su marchitamiento y muerte total. La yesca, como ocurrió con la filoxera es una de las enfermedades más graves a nivel mundial en el sector vitivinícola.

En denominaciones de origen como Ribera del Duero, Toro o Cigales se ha pasado de un grado de afectación del 1,8% al 10,5% en solo unos años. Y la tendencia, lejos de remitir va al alza.

La enfermedad ha ido avanzando de forma lenta y continuada, llegando a perderse partes importantes de la producción en muchas explotaciones. Quien suscribe estas líneas da fe de ello.

En un campo que tengo de 7'5 hectáreas de Syrah, hay más de cinco mil cepas afectadas y otro tanto ocurre con el tempranillo, que transformé de vaso a espaldera.