Estamos hartos de ver programas y series de televisión que discriminan a las mujeres, cine español para adolescentes, premios no dados a campeonas de deporte en niveles tanto locales como internacionales, títulos no asignados a grandes científicas, maltrato, insultos, acoso por la calle y las redes sociales. Desde hace ya mucho tiempo, el feminismo lleva vulgarmente asociada la idea de que tiene la finalidad de favorecer a las mujeres por encima de los hombres. En cambio, es un movimiento que lucha por la igualdad entre géneros, para que tanto hombres como mujeres tengan los mismos derechos. Hoy en día se lucha mucho por la mujer, al oponerse a la violencia de género, que desgraciadamente es una de las lacras de los que tenemos noticias muy frecuentemente. También se encuentra muy presente el feminismo frente al islam, ya que en algunos casos, el trato de la mujer y su función no es nada justo.

¿Quién no tuvo que hacer frente a comentarios sexistas? ¿Quién fue rechazada por un hombre en una entrevista de trabajo solo por contemplar tener hijos en sus planes de futuro? El feminismo no es violencia. No discrimina a los hombres. No es victimismo. No es odio. Busca tanto la igualdad como el respeto, y cuestiona los roles sociales que deben atribuirse a cada género. Mónica Cuesta Giner. Vallada.