Altos funcionarios y escoltas del Ayuntamiento de Castelló gozaron hasta mitad de este año de unos importantes incentivos salariales, aparte de sus sueldos. Cobraban unas productividades que superaban los 1.000 euros mensuales. De este grupo forman parte escoltas y tres altos funcionarios. El ayuntamiento les recortó este complemento en junio un 60 % y un 40 % respectivamente y este ajuste se mantendrá en 2013.

El ejecutivo local gastó en 2011 en torno a 1,3 millones en productividades. Los 9 escoltas del ayuntamiento lideraban la cúspide de los incentivos, seguidos del interventor y los dos secretarios generales municipales. En junio de 2011, el equipo de gobierno acordó con el sindicato mayoritario de la Junta de Personal (Comisiones Obreras) un recorte medio de un 30% en las productividades del personal y rebajó la partida de los 1,3 millones a los 650.000 euros. El mayor tijeretazo se aplicó en escoltas y altos cargos municipales. Los incentivos de los primeros bajaron un 40 % y los de los altos cargos del personal un 60 %. Hasta entonces, los escoltas percibían 1.600 euros al mes en este concepto, el interventor, 1.995; el secretario general de pleno, 1.150, y la secretaria general de la Administración Local, 780. Asimismo, el antiguo asesor de vivienda estuvo recibiendo hasta marzo 1.900 euros por dirigir la ahora clausurada Oficina de Municipal de Vivienda. Este cargo quedó vacante en marzo tras jubilarse su responsable, Miguel Pastor. El objetivo de esta entidad era el de fomentar la venta de viviendas de promoción pública de Castelló y cerró hace ocho meses tras sólo cinco año de existencia.

El alcalde, Alfonso Bataller, previó primero rebajar un 75 % las productividades pero la final redujo este porcentaje hasta el 30 % de media. No obstante, los agentes adscritos al primer edil siguen obteniendo en productividades 960 euros al mes. Por su parte, los agentes de la Policía Local y los bomberos, que percibe una cantidad inferior a los 500 euros, tienen un ajuste de un 30 %.

Los sindicatos de CSIF y UGT y el grupo socialista se desmarcaron del acuerdo de junio. Consideraron excesivos los recortes en bomberos y Policía Local y defendieron la supresión de las productividades de los funcionarios con salarios más altos. Cabe recordar que la secretaria general del pleno cobra 82.283 euros anuales brutos; el secretario general de la Administración Local, 81.818 y el interventor con 76.106, unas retribuciones que superan los honorarios del presidente de la Generalitat, Alberto Fabra.

Retrasos en el pago

Por otra parte, CSIF ha denunciado que el ayuntamiento adeuda las productividades desde febrero.