Todo aquel que ponga en cuestión la razón de ser del aeropuerto de Castelló se arriesga a que le caiga una reprimenda pública de la diputación. Es lo que va les va pasar esta mañana a la vicepresidenta del Consell, Mònica Oltra, y al conseller de Hacienda, Vicent Soler, que serán objeto de sendas reprobaciones por sus declaraciones sobre la infraestructura.

La diputación pugna por mantener protagonismo en el aeropuerto y por evitar que el nuevo gobierno valenciano se cuelgue la medalla del aterrizaje de los primeros vuelos. El PP hará valer hoy su mayoría absoluta en la institución provincial para sacar adelante en el pleno una moción de apoyo al aeropuerto y de reprobación de dos miembros del gobierno valenciano.

La iniciativa incide en el logro de las nuevas conexiones de Ryanair y defiende la base como «una reivindicación histórica de todos los sectores empresariales y de la sociedad de Castelló». Por ello, señala que «no se comprende» que «miembros del Consell, dirigido por Ximo Puig, menosprecien, se mofen y ridiculicen esta fundamental infraestructura».

Los populares cargan contra la vicepresidenta de la Generalitat, Mònica Oltra, por manifestar que el aeropuerto es un «fracaso» y «una chapuza constate». También le afean su «desconocimiento absoluto de la realidad castellonense» por situar el aeropuerto de Vilanova-Benlloch a 60 kilómetros del de Manises «cuando la realidad es que se sitúa 108 kilómetros» y a 147 de Peñíscola, el principal receptor provincial de turistas.

También hay reprimenda para el conseller de Hacienda, Vicent Soler, quien, según el PP, «se ha burlado de todos los castellonense en su última comparecencia en las Corts afirmando que la construcción de esta infraestructura es un capricho como otro cualquiera´».

Pide el apoyo público de Puig

Ante este «ataque reiterado al interés provincial» por parte del Consell, el PP dirige un triple mensaje al ejecutivo autonómico. Por una parte, insta al president Ximo Puig a que manifieste públicamente su apoyo al aeropuerto y vele por que los miembros del Consell «dejen de dañar la imagen de la provincia y su aeropuerto». En segundo lugar, reprueba la conducta y declaraciones de Mònica Oltra y Vicent Soler, «que tanto daño hacen a la puesta en valor y a la llegada de turistas a nuestra provincia». Tras dar estopa al Consell, la diputación le pide que colabore económicamente en la promoción turística de Castelló en los lugares de origen de los vuelos.

La influencia de la diputación en el aeropuerto ha quedado reducida a la mínima expresión. De sentar tres consejeros en la sociedad pública Aerocas, se ha quedado con Javier Moliner como único representante. Además, no tiene voz en el comité ejecutivo de Aerocas, integrado por cargos del Consell y un miembro de los empresarios turísticos. Para más inri, la presidencia de la sociedad la ostenta el secretario provincial del PSPV y exportavoz en la diputación, Francesc Colomer. La Generalitat planea una profunda renovación de la plantilla de Aerocas, que supondrá la salida de los trabajadores nombrados en la etapa de gobierno del PP. La actuar directora general, Patricia Llopis, tiene fecha de caducidad y se le busca sustituto.