La plaza de la Paz de Castelló acogió ayer una nueva jornada de protesta de los vecinos de la Marjaleria de Castelló, que tras dar un periodo de gracia de 100 días al nuevo gobierno municipal denuncia la falta de actitud del bipartido «para cumplir lo que prometió en campaña electoral». Los vecinos creen que con la nueva ley urbanística existen cauces para paralizar los expedientes de derribo y sanciones y reconducir la problemática de la zona.