El partido entre el Vinromà y el Orpesa, jugado el sábado en el campo de El Temple, finalizó con empate (2-2) y con nueve jugadores cada uno de los contendientes, tras sufrir cada uno de ellos dos expulsiones. Hasta ahí todo claro, pero una vez finalizado el encuentro, que resultó muy movido en especial en la segunda mitad del mismo, un aficionado del equipo local se acercó al colegiado torreblanquino José Vicente Capdevila Fabregat y le propinó una patada en la rodilla, tal y como queda reflejado en el acta del encuentro.

Este lamentable incidente, de menor gravedad, pero igual de denunciable, llega siete días después de que un futbolista del Vinaròs le propinase un cabezazo a un árbitro asistente que provocó la suspensión del partido de Preferente contra el Puzol. Competición le impuso una sanción de treinta y un partidos de castigo.