La alcaldesa de la Vall d'Uixó, Tania Baños, y el presidente de Facsa, Enrique Gimeno, firmaron ayer un convenio para asegurar el suministro de agua potable a familias en situación de vulnerabilidad. El acuerdo contempla la coordinación en el pago de las ayudas municipales por las deudas generadas por la ciudadanía con el suministro de agua potable para que no existan hogares en la localidad que carezcan de este bien.

Baños señaló que desde el principio de la legislatura «hemos dicho que ni como políticos ni como personas podíamos permitirnos que a nuestros vecinos y vecinas les corten suministros básicos como el agua, que es necesaria para tener una vida digna». Además, agradeció «la predisposición de Facsa para firmar este acuerdo» y el gran trabajo realizado por Servicios Sociales «para que hoy sea una realidad».

El texto coordina las ayudas municipales destinadas a cubrir las necesidades mínimas de suministro de agua a familias en situación de emergencia social y a paliar la pobreza energética. Además, incluye las condiciones de colaboración y mecanismos de coordinación entre el consistorio y Facsa, que principalmente se refieren a aplazamientos de pago y procedimientos para evitar cortes de agua potable por impago.

El consistorio, a través de el departamento de Servicios Sociales, evaluará las circunstancias de necesidad de manera individual.