Mulet accedió a este cargo honorífico, que no comporta remuneración, en el año 2001 a propuesta de la Germandat de Els Cavallers de la Conquesta. Su elección fue aprobada por el entonces alcalde, José Luis Gimeno. El actual equipo de gobierno ha optado por suprimir la figura del ermitaño y por crear un reconocimiento honorífico que tendrá un año de duración. El ayuntamiento asumirá la vivienda del ermitorio, que hasta el momento ha tenido un disfrute particular por parte del ermitaño. Este cambio ha sido promovido por el concejal de Ermitas, Enric Porcar, y ya ha sido abordado por la junta de gobierno local. Comportará la salida de Mulet tras 16 años en el cargo. El parlamentario autonómico reiteró ayer que nadie le ha informado de su posible salida y afirmó que se pronunciará cuando la alcaldesa lo ratifique.

Se esperaba que el relevo de Mulet se produjera ayer, pero fuentes municipales no supieron especificar cuándo se realizará.

El ejecutivo local lleva tiempo estudiando un revisión de la figura del ermitaño. Barajó primero la posibilidad de ceder este puesto a un colectivo, pero finalmente ha optado por eliminarlo al considerar que no tiene sentido su continuidad cuando el mantenimiento de la Magdalena depende del propio ayuntamiento. Además, también quiere reconocer en un próximo acto público la labor de Mulet.

La Gestora de Gaiatas estrenará la primera distinción honorífica del ermitorio. El consistorio hará entrega de este título el 12 de marzo en un acto al que también se invitará al todavía ermitaño de la Magdalena.