El departamento de Servicios Sociales ha incorporado una modificación en las bases que regulan la concesión de Prestaciones Económicas Individualizadas (PEI) que abre la puerta a una ampliación de la partida económica de 60.000 euros. Gracias a esta nueva cláusula la tramitación se simplificará y el consistorio reducirá el plazo para disponer de los fondos.

Así las cosas, Servicios Sociales ha reservado 225.000 euros en el presupuesto de 2018 para ayudas de emergencia social, una cantidad que podrá elevar «hasta los 285.000 euros en caso de necesidad y sin tener que tramitar unas nuevas bases», como confirmó la concejal del área, Diana Belliure. La cifra excede los 232.213,35 euros que Almassora destinó en 2017 a esta finalidad por lo que el equipo de gobierno asegura disponer de margen económico para la asistencia social.

Tal como reflejan las bases de 2018, las ayudas se conceden con el objetivo de contribuir al desarrollo de las personas mayores o en caso de emergencia social extraordinaria. En el primer supuesto, Servicios Sociales asiste a la ciudadanía que, debido a problemas motrices y sensoriales, requiere realizar una adaptación funcional del hogar, adquirir útiles para la vida diaria o adecuar un vehículo a motor para sus desplazamientos.