La anunciada huelga «a la japonesa» anunciada por el sindicato CSIF de la Policía Local de Paterna prácticamente fue realizada por un agente municipal, pues llegó a firmar él solito 106 sanciones durante el pasado fin de semana, como protesta por los recortes salariales decretados por el gobierno municipal del Partido Popular que afectan a los funcionarios y policías.

Ese fin de semana, según ha podido averiguar Levante-EMV, los policías multaron a 163 conductores por diferentes causas, por lo que las sanciones de tráfico de ese agente representan el 65 por ciento de las denuncias firmadas entre viernes, sábado y domingo. Y eso que trabajó durante dos días.

Fue el sindicato CSIF quien defendió que se había realizado una huelga «a la japonesa» poniendo más multas, siguiendo el ejemplo de protesta en Japón que consiste en trabajar más. Sin embargo, desde la Jefatura se desmintió que existiera tal huelga en el colectivo policial porque los sindicatos SPPLB, UGT, CC OO, STA y, al parecer también una parte del CSIF, decidieron no emprenderla pues perjudicaba la imagen del cuerpo de cara al vecino.

Pero por el número de multas impuestas, un agente sí que se desmarcó y se empleó a fondo en su huelga, sancionando a 106 personas. Si se tiene en cuenta que en un fin de semana normal, la media de sanciones oscila entre 30 y 40, pues el resto de agentes pudieron poner una veintena de sanciones más como protesta. De ahí que desde Jefatura se desmintiera la existencia de la huelga. Desde el CSIF, un portavoz indicó, el lunes, que se había paralizado porque se iba a negociar una mejora en los cuadrantes de horarios. El SPPLB —sindicato mayoritario en la policía— expone que si se mejoran estos cuadrantes no habrá protesta.

Las sanciones se pusieron sobre todo en la zona centro, así como en los alrededores del Gran Teatro, aprovechando la asistencia de mucho público al acto de exaltación de la reina de las fiestas. En un sondeo realizado por Levante-EMV a principios de semana, los vecinos exigían a la policía que resolviera sus conflictos internamente. Ayer, la Asociación de Vecinos del barrio de Campamento pidió a la Policía Local que «pare de poner denuncias a los vecinos, muchos de ellos en el paro desde hace tiempo y otros que llevan dos años sin que se le haya subido ni el IPC en sus nóminas mientras que a los funcionarios policiales se les ha subido mucho más desde que comenzó la crisis».

Por otro lado, las protestas funcionariales se materializaron ayer con un plante de un numeroso grupo de trabajadores al alcalde de Paterna, Lorenzo Agustí, que pretendía explicarles los recortes salariales añadidos al del Gobierno central. En un comunicado, los sindicatos UGT, CC OO y STAS-IV aseguraron que cuando el alcalde se iba a dirigir a los empleados, éstos pidieron intervenir para manifestar su desacuerdo con los recortes «impuestos» que «vulneran la negociación colectiva». Entonces, se levantaron y se fueron. El alcalde explicó que los recortes afectarán a todo el consistorio, salvo a las ayudas sociales.