Al menos cinco personas resultaron heridas de diversa gravedad durante la «cordà» que se celebró ayer viernes de madrugada en el polideportivo de Beniparrell, después de que explosionasen accidentalmente varias cajas de cohetes nada más comenzar el acto. Uno de los heridos sufrió quemaduras en el 36% del cuerpo y ayer seguía ingresado en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) del hospital La Fe, de Valencia. El resto de víctimas pudieron volver a sus casas tras ser atendidas de las quemaduras, provocadas más por el calor de las llamas que por la pólvora.

Mientras que el alcalde de la localidad —y también participante en la «cordà»—, Vicent Hernandis, aseguraba ayer que las explosiones sólo afectaron a cinco cajas y que únicamente dos de los alrededor de 30 participantes tuvieron que ser trasladados a la Unidad de Quemados de La Fe, Santi Fuertes —uno de los heridos y vecino de Paterna— afirmaba que fueron al menos cinco las personas atendidas en La Fe con quemaduras, mientras que los cajones que reventaron fueron alrededor de una veintena.

Por su parte, el presidente de la Federación Interpeñas de Paterna, César Andreu, elevó la cifra de trasladados al hospital a siete, y, al igual que Fuertes, afirmó que fueron al menos una veintena los cajones afectados. Cada cajón, según señaló Andreu, contiene unas treinta docenas de cohetes, por lo que, en menos de un minuto, más de 7.000 cohetes borrachos estuvieron funcionando a la vez en un recinto cerrado de 60 metros de largo por 6 de ancho. «Con toda la experiencia que tengo en la coetà de Paterna, en la vida había visto algo igual —aseguró Andreu—. Me asusté y todo». Los paterneros son expertos en el disparo de cohetes.

Tal como relataban los dos testigos vecinos de Paterna, los hechos sucedieron nada más comenzar el acto, al encenderse la «traca» que sirve como «pistoletazo de salida». Según Andreu, las chispas de esos cohetes pudieron haber entrado en uno de los cajones, activando todos los artefactos que tenían en su interior, que salieron al exterior tras reventar la parte inferior de la caja.

«Son accidentes propios de una cordà»

El Ayuntamiento de Beniparrell quiso quitarle importancia a lo sucedido asegurando, en palabras del alcalde, que fueron accidentes propios de un acto como la «cordà». Vicent Hernandis señaló que el recinto cumplía con todas las medidas de seguridad y que se realizó un control exhaustivo de los participantes, vigilando que entrasen todos perfectamente ataviados. También aseguró que la explosión de los cajones pudo haberse producido al abrirlos para coger cohetes e introducirse las chispas u otro cohete del exterior. Desde hace al menos 4 años, la «cordà» se celebra en Beniparrell en un recinto vallado. El cambio provocó que participasen desde entonces menos vecinos . v. c. beniparrell