El pleno extraordinario del Ayuntamiento valenciano de Cullera ha aprobado hoy, con los únicos votos a favor del PP, el programa de actuación integrada (PAI) de La Bega, conocido popularmente como "Manhattan de Cullera", cinco años después del inicio de este proyecto urbanístico.
El grupo popular ha decidido agilizar la aprobación de esta actuación para asegurar el desarrollo del puerto deportivo y pesquero de la ciudad, mientras que el PSPV-PSOE se ha abstenido al considerar que el plan no responde al "modelo urbanístico" que defiende su partido, y ha votado en contra el grupo municipal de Alternativa Progresista de Cullera-EU.
Y ya comienzan a conocerse algunas cifras, más allá de que el conocido popularmente como Manhattan vaya a albergar 33 torres de 25 alturas y dos hoteles de 40 pisos. Los costes de urbanización de este proyecto también recogen cifras de infarto. Según la documentación relativa a la aprobación definitiva de este PAI a la que ha tenido acceso Levante-EMV, únicamente la urbanización del Manhattan requerirá una inversión total de 92,3 millones de euros (sin IVA). En esta cifra se incluyen las cargas de urbanización, que ascienden a 73,6 millones; las de urbanización por canones -agua, electricidad- por un valor de 17,7 millones y las indemnizaciones, que se estiman en 883.009 euros. Pese a ello, la inversión total que requerirá la urbanización del Manhattan ha descendido en 1 millón de euros.
En la documentación relativa a la aprobación del plan parcial de 2009 se preveía que la inversión total fuera de 93,1 millones. Entre los diferentes gastos cabe destacar los 4,8 millones que costará la conexión con la subestación eléctrica de Benicull. Para esta conexión Iberdrola construirá una nueva subestación en Cullera en los alrededores del Camí de l'Arrós. En los informes de 2009 este gasto aún no estaba contemplado. La conexión eléctrica del Manhattan ha sido uno de los puntos que más ha retrasado el proyecto, según explicaron anteriormente fuentes municipales.
Si se compara la documentación de hace un año con la que se aporta para aprobar el PAI en el pleno se observa variaciones en los costes. Dentro del coste total de las cargas de urbanización, las obras de urbanización ha sido el apartado que ha sufrido un mayor descenso, pasando de 66,1 millones a 61,2 millones.Los gastos de gestión han pasado de 2,7 millones a 2,5 millones y el beneficio que tendrá el ayuntamiento a través de la empresa municipal (Emucsa), encargada de la urbanización, ha descendido en 500.000 euros (ha pasado de 6,8 millones a 6,3 millones).
