No hay dinero, pero sí motivación. El Ayuntamiento de Llombai ha logrado movilizar a asociaciones y entidades locales para que colaboren en un plan de restauración de las 962 hectáreas de monte quemadas el pasado verano y que promueve por su cuenta ante la parálisis del Consell, que ostenta las competencias en la gestión de los montes.

El plan, cuya memoria ya está redactada, señala que la falta de liquidez impide al Consell realizar actuaciones forestales, incluso las más urgentes, y por eso el ayuntamiento pretende intervenir en terrenos de su propiedad para restaurarlos y proteger las zonas que se salvaron del fuego.

El incendio originado en Cortes de Pallás el 28 de junio provocó daños en terrenos municipales y afectó a explotaciones agrícolas, ganaderas y apícolas. La memoria señala que el "importante" número de afectados -aunque sólo seis lograron acceder a las ayudas del Consell por valor de 4.061 euros-, la extensión y alto valor ecológico de la superficie quemada y los daños en actividades económicas aconsejan la adopción "inmediata" de medidas de restauración. Así, los primeros trabajos serán la eliminación de los restos del incendio y después se procederá a la ampliación de los cortafuegos.

El alcalde, José Forés, explicó ayer que después de los incendios del pasado verano fueron "muchos" los vecinos que mostraron su disposición a participar en las labores de restauración de la montaña quemada por lo que decidieron poner en marcha un plan.