El fiscal de Menores adscrito a la Fiscalía de Valencia, Pablo Ángel Ponce, se mostró ayer partidario de prohibir el uso de móviles con internet a menores de 14 años. Ponce participó en una conferencia en Llaurí organizada por la concejal Eva Padilla y en presencia de la alcaldesa, María José Galán, en la que advirtió a medio centenar de padres y un grupo de adolescentes sobre los peligros que encierran las nuevas tecnologías, en especial para un colectivo tan sensible como el menor.

Ponce, en declaraciones a Levante-EMV antes de la conferencia, aseguró que en el ámbito de las nuevas tecnologías "los padres hemos fracasado porque a nosotros no nos han enseñado cómo usar el teléfono móvil o el ordenador. No lo transmitimos porque no sabemos, porque nos han educado diciéndonos 'no te acerques a desconocidos, no tomes aquello' pero la manera que tienen los menores de relacionarse ha cambiado, ahora son las redes sociales y no hemos podido transmitir a nuestros hijos la correcta utilización del móvil y de internet y sobre todo concienciarles de que es un peligro para ellos", aseguró.

"Lo peor es internet en teléfono, todo lo que se sube a internet deja de tener privacidad y los menores eso ni se lo pueden imaginar. Si un menor manda un vídeo o una foto, deja de controlarla, es como colgarla en medio de la plaza. Luego es imposible recuperarla, ¿dónde vas a Google, a Estados Unidos a reclamarla?", preguntó.

Ponce aseguró que el principal quebradero de cabeza de la fiscalía especializada en este ámbito es la cantidad de denuncias que reciben como consecuencia de fotografías o vídeos de contenido sexual de adolescentes -mayoritariamente chicas- que acaban en internet "porque se la enviaron a su novio, y este a un amigo y cuando tratan de recuperarla ya la ha visto todo el pueblo. Han aumentado muy considerablemente", remarcó. "Antes, -añadió- la mayor parte de estas denuncias provenían de grabaciones de peleas o vejaciones con el móvil, pero ahora son de índole sexual".