La continuidad de la sala de lo penal de Alzira está en el aire. La junta de jueces de Valencia ha convocado para mañana viernes una reunión para abordar el traslado a la capital de este juzgado, que cuenta con un magistrado de refuerzo debido a la gran carga de trabajo que soporta o, en su defecto, liberarle de asumir también las ejecutorias de sentencias, un trabajo que en Valencia ciudad realizan de forma específica dos salas mientras que el resto se centra en la celebración de juicios. Los juzgados de lo penal de Paterna y Torrent también asumen ejecutorias, aunque el ámbito territorial que abarcan es menor.

La sala de lo penal número 15 con sede en Alzira es una de las más saturadas ya que atiende también los partidos judiciales de Xàtiva y Ontinyent y abarca por tanto más de 80 municipios. Entró en funcionamiento a principios de 2007 y, en aquel momento, el entonces conseller de Justicia, Miguel Peralta, argumentó que el incremento de la delincuencia en la Ribera hacía necesaria su creación. En mayo de 2009 se le asignó un segundo magistrado debido a la elevada carga de trabajo por lo que, en la práctica, desde entonces Alzira ha contado con dos juzgados de lo penal en unas dependencias muy deficientes, ya que se ocuparon de forma provisional a la espera de la construcción de un Palacio de Justicia de Alzira que, siete años después, sigue en lista de espera. La escasez de recursos humanos y los retrasos en cubrir vacantes es otro de los problemas que ha sufrido este juzgado.

La sala había sido revindicada durante casi una década por los profesionales del derecho de la comarca que veían en este juzgado desplazado una forma de evitar múltiples viajes a Valencia tanto de ciudadanos como de abogados o miembros de los cuerpos y fuerzas de seguridad que son citados a declarar en un procedimiento. El decano del Colegio de Abogados de Alzira, Antonio Llácer, ya anunció ayer su rotunda oposición a que se suprima un servicio por el que tanto se había luchado. La junta de jueces de lo penal tomará el viernes una decisión sobre la sala de Alzira, si bien el traslado a Valencia debería ser ratificada por el Consejo General del Poder Judicial.