El hospital de larga estancia y de enfermos crónicos de la Pedrera, en Dénia, que es el único que mantiene la gestión pública en la Marina Alta, sigue esperando a pacientes de la comarca. La empresa Marina Salud, que gestiona el departamento comarcal de salud, sólo ha remitido en el último mes a un enfermo. Y eso que a mediados de diciembre llegó al compromiso con la conselleria de Sanidad de derivar a pacientes a la Pedrera. Hasta entonces no lo hacía porque consideraba demasiado elevada la factura de los tratamientos.

La Plataforma en Defensa de la Sanidad Pública denunció ayer que nada ha cambiado. En realidad, Cati Mínguez, que es una de las representantes de la plataforma, advirtió de que incluso se ha ido a peor. «No han mandado ni a un paciente. Además, han cerrado 37 camas de medicina interna en el hospital de Marina Salud», denunció.

Fuentes de la concesionaria indicaron que sí se ha enviado a un paciente a la Pedrera. Sostuvieron que no ha habido necesidad de derivar a más.

Los portavoces de la plataforma difundieron ayer la queja que hace unos días presentaron ante el Síndic de Greuges. La queja incide en que es «una discriminación» para los vecinos de la Marina Alta que la concesionaria no los envíe al hospital de crónicos de su comarca ni a otros centros de la red pública. La plataforma sostiene que Marina Salud prefiere derivarlos a hospitales privados.

El escrito que el Síndic ya está analizando enumera «los múltiples incumplimientos del contrato» por parte de la empresa. «La conselleria de Sanidad ya no puede mirar hacia otro lado. Debe cesar al equipo directivo de Marina Salud y nombrar a uno nuevo que prepare la transición hacia la sanidad pública», subrayó Francisco Sánchez, también de la plataforma.

La queja señala que la concesionaria da prioridad a los asegurados de DKV, empresa que posee el 65 % de las acciones de Marina Salud, en lugar de a la población protegida. También indica que «la calidad de la prestación sanitaria ha bajado alarmantemente» desde que la gestión del departamento de la Marina Alta se privatizó en 2009. Critica que la concesionaria aplica «criterios economicistas por encima de los clínicos».

La plataforma denuncia que hay cláusulas del contrato que no se han cumplido, como la de la construcción de un nuevo centro de salud en Dénia y de la ampliación del de Calp. Y avanza que va a presentar un contencioso por este incumplimiento.

Aunque la queja insta al Síndic a hacer «las investigaciones y gestiones pertinentes para la reversión de esta comarca al sistema de sanidad pública», los representantes de la plataforma admitieron ayer que José Cholbi ya les adelantó que el Consell no está por la labor de rescatar la concesión. Sin embargo, también les dijo que iba a estudiar a fondo la queja y a realizar las oportunas indagaciones.