Más de año y medio ha transcurrido desde que la empresa encargada de la rehabilitación del almacén de efectos y repuestos de la antigua siderurgia del Port de Sagunt diera por concluidas las obras para convertirlo en el Museo Industrial.

Sin embargo y después de que la Generalitat, impulsora de esa última parte del proyecto a través de más de 1,7 millones euros, rechazara la recepción de las actuaciones, esta semana por fin está previsto que el ayuntamiento encargue las mejoras necesarias para dejar el museo en condiciones para su apertura.

En cualquier caso, este paso no significa la inmediata apertura al público de este centro porque, pese al tiempo transcurrido, la Fundación de Patrimonio Industrial todavía no ha definido el proyecto museístico que debe servir de guía para dar contenido cultural al espacio.

El principal obstáculo para avanzar en esta línea es el económico, ya que, aunque puede haber muchas ideas para su desarrollo, el visto bueno debe darlo el patronato de la fundación, organismo que lleva años sin reunirse, pese a la urgencia en aclarar determinados temas y a las convocatorias que se han sucedido durante los últimos meses, pero que se han cancelado por distintos contratiempos tanto de la consellera de Cultura, María José Catalá, como del alcalde de Sagunt, Alfredo Castelló. En este sentido, la reciente visita de la directora general de Cultura, Marta Alonso, sirvió para recordar el interés municipal en que el patronato se reúna cuanto antes.

A expensas de esta cita y según informa la concejala de Patrimonio y Contratación, Laura Casans, esta semana está previsto adjudicar por junta de gobierno los trabajos presupuestados en cerca de 60.000 euros para solucionar los desperfectos que presenta el Museo Industrial.

Estas deficiencias se centran en una zona del suelo de hormigón, que debe volver a pulirse, la instalación de algún punto de luz más, una parte del mobiliario y cuestiones de señalización.

Por otra parte, la empresa PAI Applications Industry, encargada de instalar el elevador del Horno Alto que permitirá ofrecer la visita completa por el monumento industrial, apura los plazos y sigue con los trabajos del diseño y fabricación del montacargas, que debería estar listo antes del verano, según los plazos del contrato.