El Ayuntamiento de Silla sabía que en la ganadería donde el sábado una mujer sufrió una lesión medular durante una capea se celebraban festejos taurinos para los que el negocio no tenía licencia, tal como ayer desveló el concejal de Els Verds, Antonio Navarro. Pero, pese a conocer lo que ocurría en el recinto, «jamás se hizo nada para impedir que prosiguiese esa actividad», algo que ahora «podría acarrear consecuencias económicas para el consistorio» en caso de que la víctima «exigiese responsabilidad patrimonial».
«El ayuntamiento sabía perfectamente que el negocio sólo tenía permiso para criar reses y no para celebrar capeas, pero hizo la vista gorda y no actuó más allá de enviar las denuncias a la Generalitat, sin preocuparse lo más mínimo por garantizar que esas actividades cesasen», explicó el regidor, conocido activista antitaurino en la localidad.
Y es que, en los últimos cuatro años, la Policía Local levantó en torno a media docena de actas de denuncia por la supuesta celebración de capeas en el negocio donde ocurrió el siniestro, «pero el ayuntamiento jamás ha sancionado al responsable de la ganadería por organizar espectáculos taurinos sin tener la correspondiente licencia», según confirmaron fuentes municipales.
El alcalde, por su parte, el popular Serafín Simeón, aseguró ayer que el consistorio sillero «ha actuado en la medida de sus posibilidades porque, en muchos asuntos, la administración municipal no tiene competencias». De hecho, insistió, «cada vez que la Policía Local ha levantado acta por la presunta actividad ilegal de la ganadería, el consistorio ha trasladado la denuncia a la Conselleria de Gobernación».
Fuentes de la Generalitat no acertaron a decir ayer si se había multado a la empresa por estos hechos. Únicamente confirmaron que la Policía Autonómica se había trasladado el sábado a la ganadería de Silla para comprobar el estado de las instalaciones (si contaba con retén médico o enfermería dada la participación de vacas bravas en el espectáculo) y los permisos de que disponía.
Lesionada al caerle encima
El siniestro, tal como ayer avanzó Levante-EMV, sucedió a primera hora de la tarde del sábado durante una capea en la que participaba alrededor de un centenar de personas, la mayoría procedentes de diferentes localidades de la Ribera. En un momento dado uno de los aficionados echó a correr para huir de un animal y, al saltar la valla de protección, cayó sobre la mujer que se resguardaba al otro lado. Como consecuencia del golpe, la víctima quedó completamente inmovilizada y sin sensibilidad del cuello hacia abajo, tal como relataron fuentes conocedoras de los hechos citando a los testigos presenciales.
Pese a que los asistentes requirieron la presencia de un equipo médico de urgencia, al parecer el responsable del negocio, que ha declinado hacer declaraciones , intentó restar importancia a lo sucedido aunque finalmente se avisó a un SAMU, que confirmó que la mujer, vecina de Algemesí, padecía una lesión medular. La ambulancia la trasladó al Hospital de la Ribera, en cuya UCI quedó ingresada. Ayer fue sometida a una intervención quirúrgica para conocer el alcance real de la lesión; al cierre de esta edición no había trascendido su estado, aunque permanecía aún en la UCI.
