El Ayuntamiento de Bétera ya tiene presupuestos para 2016. Aunque se han hecho necesarias dos sesiones plenarias para aprobarlos. El 23 de junio se aplazó la aprobación ante la duda apuntada por el secretario municipal, quien argumentó que en caso de empate en la votación, la alcaldesa no podía romperlo con su voto de calidad y que se tenía que trasladar a la Junta de Gobierno el documento para su aprobación definitiva. Finalmente el pasado jueves se aprobó el presupuesto pese a gobernar la alcaldesa de Compromís, Cristina Alemany, en minoría, y por la ausencia de la portavoz de Ciudadanos, Eva Martínez, que acaba de ser madre. El presupuesto quedó fijado en poco más de 17 millones de euros. El equipo de gobierno „formado por el tripartito Compromís, PSPV y la marca local de Podemos„ consultó al Consejo General de Secretarios, Interventores o Tesoreros de la Administración Local (Cosital) para certificar que las cuentas se tenían que aprobar en el pleno y no en la Junta de Gobierno. Además, el regidor de Personal, José Rodado, argumentó que hay una sentencia que „a falta de publicarse„ declara inconstitucional la aprobación de las cuentas por la Junta de Gobierno.

En Bétera dos criterios diferentes „la del secretario y la de la interventora„ propiciaron las consultas y la paralización de este importante plan de inversiones e ingresos que marca la dirección política que quiere implantar el gobierno local. Tras un intenso debate y múltiples reproches entre oposición y ejecutivo local, los presupuestos se aprobaron con los votos a favor de Compromís (6), PSPV (3) y Asamblea Bétera Ciudadana (1); y con la opinión en contra de PP (6) y Mas Camarena-Cube (3).

El regidor no adscrito, Pedro Gallén „tránsfuga de Ciudadanos, se abstuvo„, y la regidora de Ciudadanos, Eva Martínez, no asistieron al pleno al estar de baja maternal. Por tanto, no hizo falta que se aplicase el voto de calidad de la alcaldesa para sacar adelante las cuentas.

La portavoz del PP, Elía Verdevío, explicó que los populares rechazan los presupuestos municipales, ante las dudas que generan las dos opiniones de los técnicos del consistorio. El PP anunció la posibilidad de iniciar acciones administrativas y judiciales en contra del acuerdo plenario.

Salvador Beltrán, portavoz de Mas Camarena-Cube, afirmó a Levante-EMV que el equipo de gobierno «había llevado los presupuestos al plenario apresuradamente y aprovechando que faltaba la regidora de Ciudadanos „contraria a aprobarlos„». Por su parte, el regidor de Compromís recordó que el pleno se convocó cuando la regidora de Ciudadanos aún no había dado a luz. «El equipo de gobierno ha traído los presupuestos al plenario por una decisión política. El pleno es la máxima representación del pueblo y no la Junta de Gobierno Local». Por su parte, Beltrán, en declaraciones a este diario, señaló que el plan contable se aprobó finalmente «con malas artes» y «con un gesto poco honesto».

Mientras, la alcaldesa Cristina Alemany le respondió: «Desde que dejaron el gobierno local porque Beltrán descubrió que no podía ser un alcalde de facto en sus urbanizaciones, Mas Camarena y CUBE andan muy desubicados y tratando de hacerse de notar a toda costa». «Para nosotros es fundamental aprobar este documento cuanto antes porque no puede estar paralizada la gestión municipal por más tiempo», enfatizó.

El regidor no adscrito, Pedro Gallén, se abstuvo a la vez que se manifestó en desacuerdo con las formas de presentación de los presupuestos y la falta de participación en los mismos. Según el tripartito de izquierdas, las cuentas «tratan de dar respuesta al contexto económico y social».