La Conselleria de Educación deberá indemnizar con 4.229 euros a una joven de 23 años que fue agredida en el pasillo de un colegio de Crevillent (Alicante).

Los hechos se remontan al 14 de noviembre de 1997, cuando G. C. recibió un cabezazo que la provocó la rotura de un hueso craneal y el desplazamiento del tabique nasal, del que tuvo que ser operada de nuevo en 2007.

Según consta en un dictamen del Consejo Jurídico Consultivo (CJC) de la Comunitat Valenciana de 29 de octubre del 2009, la Generalitat debe hacerse cargo de los gastos de la intervención quirúrgica, de la inversión en productos farmacéuticos y de los gastos derivados de la incapacidad temporal, incluidos los morales. En un informe anterior del mismo organismo datado en 2008, se acredita que la agresión se produjo "sin que los profesores pudieran intervenir por la imprevisibilidad y rapidez del acto", aunque no exonera a la Administración de la responsabilidad. De hecho, en el mismo texto el CJC agrega que "no se llegaron a adoptar las medidas necesarias para evitar que hechos de esta naturaleza suceda, sobretodo si son causados por menores cuyo comportamiento irascible plantea dificultades especiales, que pueden generar situaciones semejantes en un futuro".

En este sentido, el órgano consultivo señaló entonces que un informe del propio centro educativo ya argumentaba "que el alumno agresor poseía un comportamiento irascible, con reacciones violentas y pasa mucho tiempo en la calle" y que en el curso anterior a los hechos (1996-1997) se le formó un expediente disciplinario".

El CJC insta a Educación a "resarcir la totalidad de las molestias, incluidas las secuelas padecidas", cuyo montante final cifra en 4.229 euros.