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El frigorífico es el electrodoméstico que más consume en casa, y es posible conseguir reducir ese consumo de energía con el simple gesto de trasladarlo de su lugar habitual a uno más espacioso y aireado, ya que el calor al que se somete el electrodoméstico en su hueco predeterminado hace que éste necesite más energía para mantener el frío del interior.

Ésta y otras medidas al alcance de cualquier ciudadano, como poner la tapa a los pucheros para facilitar que hierva el agua, son los consejos que ofrecieron expertos en la materia en la jornada organizada por el ayuntamiento de Valencia, «El cambio climático en el ámbito doméstico», que tuvo lugar ayer.

El 18% del consumo energético total en España se realiza en las viviendas, lo que supone que cada hogar produce alrededor de cinco toneladas de CO2 anuales, cinco veces más que en cualquier país de América Latina. El objetivo de esta jornada es concienciar a los ciudadanos de que con un pequeño gesto que se haga en casa se puede luchar contra problemas globales que amenazan al planeta como el del Cambio Climático.

Por ejemplo, la limpieza de los aparatos eléctricos contribuye a aprovechar la máxima eficiencia de éstos, ya que si están sucios necesitan más energía para poder funcionar bien. Por otro lado, no poner el lavavajillas o la lavadora hasta que estén llenos, así como evitar las temperaturas altas para lavar también son buenos recursos contra el derroche energético. Además de colocar el frigorífico en una zona ventilada también es conveniente no abrirlo y cerrarlo si no es necesario, ya que esto supone que el electrodoméstico necesite más energía para volver a su temperatura habitual. Aunque su precio sea más elevado, se puede ahorrar hasta un 80% de energía cambiando las bombillas incandescentes por las de bajo consumo o de tecnología LED. También es muy importante apagar los electrodomésticos completamente, es decir, desenchufarlos cuando no los estemos usando y no dejarlos en «stand-by», puesto que así ahorraremos hasta un 15%. En cuanto a la calefacción y el aire acondicionado, es conveniente mantener la temperatura entre los 21 y 23 grados.

Estos consejos se suman a otros habituales como desplazarse lo menos posible con vehículo propio y, si se hace, tener una conducción eficiente manteniendo la velocidad constante, o reciclar. Podríamos ahorrar la energía suficiente como para mantener encendido el televisor durante tres horas por cada botella que reciclásemos.

Manuel Toharia, director científico de la Ciudad de las Artes y las Ciencias, quien intervino en la jornada, aseguró que «el nivel de desarrollo de los países ricos ya no es sostenible» e hizo hincapié en que «lo importante es la movilización de las personas para ser más ahorrativas sea cual sea el nombre que se le ponga al problema».

Por su parte la concejala de medioambiente del Ayuntamiento de Valencia, Mª Àngels Ramón-Llin, dijo que la intención de la jornada convocada por su departamento era «que la gente se fuese con un mensaje claro de lo que puede hacer en la vida diaria contra el cambio climático, en su entorno más próximo».