José A. Vidal Castaño (Benimàmet, 1941) se ha doctorado con 71 años recién cumplidos. Nada más recibir el sobresaliente cum laude por su tesis sobre el sargento Fabra, contó emocionado que sentía que acababa de cumplir «una deuda pendiente». «Viví mi estudios universitarios de forma discontinúa por mi militancia política durante la Dictadura y la Transición, por lo que con la vuelta a los estudios quería recuperar el ´tiempo perdido´. Ése es el sabor simbólico y especial que para mi tiene doctorarse a los 71 años», concluye.

Hijo de un maestro de la República represaliado, estudió Magisterio y Filosofía y Letras en la Universitat, donde el sueño revolucionario le llevó a ingresar en el clandestino Partido Comunista de España Marxista Leninista (PCE-ml). En 1971 ganó por oposición una plaza de maestro en l´Eliana. Allí fue el primer director del colegio público Virgen del Carmen elegido por el claustro. Sus alumnos de esta escuela le recuerdan aún como un docente avanzado a su tiempo.

Su participación activa en la lucha contra la dictadura le llevó en 1975 a tomar la decisión de huir a Francia ante la presión de la Brigada Político Social. En mayo de 1976 fue detenido cuando el autobús con el que volvía de Francia llegó a Barcelona. Con el también fue apresado Rafael Blasco, actual síndic del PP en las Corts pero entonces otro activo miembro del PCE-ml. La Policía los vinculaba al grupo armado Frente Revolucionario Antifascita y Patriota (FRAP).

Encarcelado en la Modelo de Barcelona con una petición del fiscal de 11 años de prisión «por propaganda ilegal y asociación ilícita en grado de dirigente», no llegó a ser juzgado al beneficiarse de un indulto previo al decreto de amnistía de 1977. No obstante, se le abrió un expediente depurativo y fue expulsado del Magisterio, «un caso único en la C. Valenciana», dice.

Le suspendieron de empleo y sueldo, pero como no había sido juzgado no le pudieron echar de funcionario. Cuando le dejaron reingresar a la docencia le obligaron a hacerlo como profesor de Religión. Posteriormente impartió Geografía e Historia en varios institutos de Valencia y Burjassot hasta que hace 11 años, al cumplir los 60, se jubiló para seguir su vocación de historiador.