Los trabajos de reparación en el viaducto de la A3 que atraviesa el pantano de Contreras comenzaron ayer, una vez finalizadas las catas y evaluaciones realizadas por técnicos del Ministerio de Fomento desde el pasado viernes. La reparación de los daños no finalizarán hasta dentro de "pocas semanas", por lo que la infraestructura continuará cerrada al tráfico, según confirmó la delegada del Gobierno en la Comunitat Valenciana, Paula Sánchez de León. Los operarios de Fomento deberán sustituir la pieza de acero de tres toneladas que ha sufrido desperfectos. Para ello tendrán que construirse dos grandes grúas que trabajarán a una altura de unos 35 metros respecto al nivel del embalse.

La operativa desplegada ayer para los primeros trabajos se centró en la eliminación de elementos superfluos -como las pasarelas de protección formadas por bloques de hormigón- para que los diferentes equipos de trabajo pudieran operar con mayor facilidad en los próximos días. Según confirmaron a Levante-EMV los propios empleados, la parte del viaducto más afectada es la mitad sur, que mantienen los equipos de carreteras del ministerio en la Comunitat Valenciana.

Durante la jornada de ayer ya se observaron en la zona varias grúas, camiones y furgonetas llenos de elementos de señalización. Por último, en la parte inferior del puente también cuelgan diferentes "lianas", ubicadas en días anteriores para que los especialistas pudieran realizar las pruebas de estabilidad sobre la base y comprobar los daños que sufrió la estructura de acero.

Según Fomento, los trabajos para reparar los daños en el viaducto consistirán primero en "preparar una plataforma de apoyo donde se colocarán las grúas necesarias que garanticen una plataforma segura para los trabajadores". Las mismas fuentes apuntaron que los operarios "han de cortar y bajar la pieza de unas tres toneladas de peso". Los técnicos todavía desconocen el motivo por el que se ha roto esta pieza de tres toneladas, que será enviada a los laboratorios especializados para analizarla. De momento, sólo saben que el deterioro de la celosía "se ha producido por la rotura del cordón de soldadura, que unía las chapas de acero".

Para analizar y detectar la pieza rota, se han utilizado medios mecánicos auxiliares hasta llegar a una altura de 35 metros sobre el embalse de Contreras y a unos 4 metros por debajo del tablero del puente. Al mismo tiempo, añadieron la mismas fuentes de Fomento, se está trabajado ya en el proyecto de cálculo y diseño de las nuevas piezas metálicas. "A continuación se iniciará la fabricación en taller de las piezas diseñadas, su ensamblaje mediante soldaduras y posterior izado y colocación en el puente", explicaron desde el departamento que dirige Ana Pastor.

La delegada del Gobierno cree que "en pocas semanas se podrá restablecer el tráfico, aunque depende de las condiciones climatológicas, ya que se trata de un puente de 40 metros de altura y hay que desplazarse con grúa", añadió. El viento y la nieve serán los principales enemigos para los trabajos en un viaducto que todavía no ha cumplido ni los 15 años.

Para mantener el tráfico que llega a la Comunitat Valenciana por esta arteria vital cortada, continúa habilitado un desvío a través de la N-III entre los dos enlaces contiguos, el de Minglanilla (en el kilómetro 242) y el de Villargordo del Cabriel (en el 255).

Esta carretera nacional tuvo ayer su prueba de fuego con el paso de los camiones que inician la ruta los domingos por la tarde. Según explicaron usuarios del vial alternativo, la circulación era fluida a las 20 horas de la tarde. Cabe recordar que los tramos donde existen subidas son de tres carriles para beneficiar al tráfico lento de los vehículos de gran tonelaje.