Levante-EMV

Levante-EMV

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Vista oral

Blasco, en el banquillo hasta Fallas

El Tribunal Superior de Justicia trata de evitar las jornadas interminables del juicio de los trajes de Camps y fija dos meses de vista para el caso Cooperación

Blasco volverá en enero al TSJCV Reuters

El juicio contra Rafael Blasco y los otros ocho procesados por el supuesto desvío de fondos de cooperación para la compra de cuatro inmuebles en Valencia arrancará en enero y está previsto que termine en plenas Fallas. El Tribunal Superior de Justicia ha aprendido de la mala experiencia del juicio de los trajes, que estuvo marcado por jornadas interminables, y ha reservado dos meses para la vista contra el exconseller.

El juicio estará presidido por la presidenta del TSJ, Pilar de la Oliva, circunstancia que ha condicionado el calendario porque los miércoles tiene que asistir a la sala de gobierno. El TSJ ha programado que las vistas sean los martes, jueves y viernes. Los lunes se van a utilizar como comodín por si se aplaza alguna testifical de la semana anterior. El primer día de juicio va a ser exclusivamente para cuestiones previas. La sala informó ayer a los abogados para que coordinen sus agendas.

La vista es por la primera pieza del caso Blasco, que se centra en la compra que la Fundación Cyes hizo en Valencia de cuatro inmuebles con fondos presupuestados para proyectos de cooperación en Nicaragua. El fiscal pide que el exconseller sea condenado a 14 años de cárcel.

La sala ha reservado el 9 de enero para la declaración de Blasco. El resto de procesados comparecerán dos cada día. El calendario se está fijando en función del tiempo que testificaron durante la fase de instrucción. Blasco estuvo declarando nueve horas.

El señalamiento ha estado condicionado por las declaraciones de los testigos que residen en el extranjero y tienen que comparecer por videoconferencia. Las acusaciones y las defensas han pedido al TSJ que prepare los interrogatorios de dos testigos en Estados Unidos, uno en Bolivia y otro en Colombia. La sala está pendiente de las comisiones rogatorias, pero cree que no habrá problemas. El fiscal del caso solicitó que declarara desde Nueva York Irene Navarro, novia de juventud y testaferro en Estados Unidos del empresario encarcelado por el caso, Augusto César Tauroni. La Fiscalía quiere que comparezca desde Miami el contratista Alfredo Rodríguez, que es el constructor que contrató Tauroni para levantar un hospital en Haití. El abogado de Blasco, Javier Boix, ha pedido que también testifique desde Miami Julia Valdés, que supuestamente actuó como testaferro de Tauroni en Florida.

El testigo que tiene que comparecer desde Bolivia es Adolfo Soler, que abandonó España con destino al país sudamericano el 27 de junio de 2011 en pleno escándalo de las adjudicaciones de la trama pero cuando todavía se desconocía la investigación judicial. Soler, fue el impulsor de la Fundación Hemisferio, la matriz del entramado corrupto. Soler era administrador de la firma Dinamiz-e, empresa propiedad en la sombra de Tauroni y que recibió numerosos contratos a dedo. Javier Boix también ha pedido que declare desde Colombia Luz Eliana Garzón Cardona, vicepresidenta de la ONG Alcolvalle, entidad que no era crítica con las políticas de subvenciones de Blasco.

La sala prepara la citación para el juicio de Clara Tirado, la diputada socialista que destapó el caso. La citación la ha solicitado el abogado de Marc Llinares, el exjefe del área de Solidaridad que presuntamente se abrió una cuenta en una oficina del Citibank en Miami tras regresar de un viaje de Panamá. El exsubsecretario de Solidaridad, Alexandre Catalá, quiere que testifique el exconseller de Bienestar Social y fiscal Jorge Cabré. Catalá ha tratado en las últimas semanas de implicar a Cabré en el caso sin ningún éxito.

Compartir el artículo

stats