Levante-EMV

Levante-EMV

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Proyecto

La diputación lanza una marca turística propia mientras el Consell busca unificarlas

El departamento de Turismo que gestiona Compromís debutará en Fitur con el nuevo sello que agrupa la oferta de la provincia

La diputación lanza una marca turística propia mientras el Consell busca unificarlas

La Diputación de Valencia tiene previsto presentar este viernes su nueva marca turística que viene a sustituir a la ya proscrita València, Terra i Mar, la seña con la que durante 20 años el antiguo gobierno popular trató de vender al mundo las bondades de este territorio. El nuevo distintivo de la corporación provincial lo impulsa el departamento de Turismo que gestiona la diputada de Compromís Pilar Moncho y busca reunir bajo un mismo paraguas toda la oferta turística de la provincia para presentarla de forma conjunta en los certámenes a los que acuda. La marca debutará en Fitur, la feria más importante del sector que se celebra a finales de este mes en Madrid.

Sin embargo, la iniciativa de Compromís en la diputación choca abiertamente con las intenciones de la Generalitat de unificar todas los sellos turísticos valencianos bajo uno solo que agrupe a toda la Comunitat Valenciana y, al mismo tiempo, de asumir las riendas de la política en este sector, en el que históricamente cada institución ha hecho la guerra por su cuenta.

Empezando por la política turística, la pretensión del Consell es hacerse en el futuro con el control de las competencias de las diputaciones que trasciendan el ámbito provincial. El Gobierno de Ximo Puig y Mónica Oltra ultima un decreto que permitirá a la Generalitat tener las manos libres para que las diputaciones no puedan ejercer competencias que deberían recaer en el Gobierno autonómico. El objetivo final es vaciar de contenido las diputaciones. De hecho, tanto en Compromís como en el PSOE „aunque no en el actual Gobierno de la diputación„ son partidarios de la desaparición de las entidades provinciales. Sin embargo, para ello se hace necesario cambiar la Constitución, por lo que en el Consell admiten que el proceso es complicado y encontrarán obstáculos. Hasta que ese cambio llegue, socialistas y Compromís defienden la necesidad de redefinir el papel de las diputaciones.

En esa línea de dejar sin contenido los entes provinciales será clave la ley de coordinación de las diputaciones de 1983, de la que únicamente se desarrollaron un par de decretos, y que el Ejecutivo autonómico pretende actualizar para disponer de una herramienta legal con la que poder atar en corto a las diputaciones. En la actualidad, PSPV y Compromís únicamente controlan la Diputación de Valencia mientras que la de Castelló y la de Alicante están en manos del PP, organismos que el Consell trata de evitar que se conviertan en ariete de la política de oposición del PP.

Este diario ya informó hace unas semanas que la Generalitat prepara una batería de decretos para atar en corto a la Diputación de Alicante y controlar sus políticas en materia de grandes eventos deportivos, gestión cultural y promoción turística.

Más oferta turística

Precisamente, en Alicante tampoco existe gran interés en fomentar la marca propia valenciana. El sector turístico reclama que la ciudad tenga su propio sello al margen de la Costa Blanca. La asociación de hoteles, que agrupa a 35 establecimientos y unas 7.000 plazas en conjunto, ha trasladado a la Generalitat la petición de recuperar una identidad turística perdida en los últimos años.

Compartir el artículo

stats