El dinero decomisado que proviene de la venta de droga tiene un objetivo específico y concreto: que revierta en la lucha contra la drogadicción.El dinero y los bienes decomisados por el tráfico ilegal de estupefacientes se venden mediante subasta pública. Con ese dinero el Ministerio de Interior crea un fondo que reparte entre las comunidades autónomas. La Comunitat Valenciana recibirá este año del Ministerio del Interior 422.000 euros de los fondos estatales que provienen de bienes decomisados por tráfico ilícito de drogas. El destino de estos fondos se centra en intensificar «las actuaciones de prevención, investigación, persecución y represión de estos delitos así como en prevención de las adicciones, asistencia e inserción social y laboral de drogodependientes y cooperación internacional en la materia». Las comunidades autónomas deciden en qué quieren invertir estos fondos, en función de las necesidades.

Por ello, la Generalitat Valenciana ha decidido destinar el grueso de la subvención (332.000 euros) a potenciar los Centros de Intervención de Baja Exigencia de las tres provincias y la unidad móvil de atención al drogodependiente, al comprobar que cada año aumenta en un 15 % la atención a nuevos usuarios y en un 13 %, los usuarios atendidos. «Estos servicios necesitan un refuerzo como estrategia para seguir manteniendo estos dispositivos como referencia de apoyo a la población drogodependiente», aseguran fuentes de la Conselleria de Sanidad.

Es más, la Comunitat Valenciana cuenta con un volumen de atención de 2.456 usuarios, de los que el 65,39 % reciben atención en los centros fijos a los que se destina la subvención y el 34,61% a través de la unidad móvil que recorre de forma itinerante aquellos puntos identificados como de alto consumo y/o tráfico de drogas.

El otro programa al que se destinan los fondos del ministerio —con 90.000 euros— es a la consolidación de los sistemas de información en materia de prevención del consumo de drogas y la normalización de las intervenciones de prevención selectiva de forma que la Conselleria de Sanidad tenga un control de información inmediata sobre qué programas se están realizando en los centros educativos o sanitarios de los diferentes municipios.

Pero ahí no queda la cosa. La Conselleria de Sanidad ha detectado que las Unidades de Prevención Comunitaria de Conductas Adictivas (UPCCA) es un recurso básico para la lucha contra la drogadicción ya que «se obtiene resultados más satisfactorios» cuando los ayuntamientos gestionan de forma directa.

En la actualidad existen 69 unidades en la Comunitat Valenciana, cuya labor fundamental «va dirigida a la prevención escolar y familiar ya que acercar el problema a la solución es uno de los principios básicos de estos recursos comunitarios».

Estos servicios dan cobertura a más de 80 % de la población pero el objetivo es llegar al 100%.

Por ello, la conselleria que dirige Carmen Montón tiene entre sus objetivos para este año que todos los ayuntamientos con más de 20.000 habitantes cuenten con una Unidad de Conductas Adictivas propia, por lo que ha reforzado la línea presupuestaria con 173.880 euros para alcanzar una inversión total de 2.234.160 euros para estas unidades. Entre las previsiones más inmediatas se encuentra la creación en 2016 de seis unidades más: tres para los municipios de Mislata, Elx y Vall d’Uixó y una para Xàtiva (antes mancomunada y que ahora funcionará de forma independiente), otra para la Mancomunidad de Espadán-Mijares (que atenderá a 15 municipios) y una última para La Serranía, que dará servicio a 13 localidades de esta comarca.

Programas de atención y ayuda

Pero ¿cómo ayudar a un drogodependiente? Desde los centros de Baja Exigencias y las unidades móviles se encargan de realizar diferente programas que atienden desde las necesidades básicas hasta atención psicológica, social, sanitaria y hasta de información y formación.

El programa de atención a las necesidades básicas abraca desde las de carácter nutricional hasta lavado de ropa, kits de higiene o espacio de descanso nocturno, mientras que el programa de atención psicológica incluye también una tención específica a la patología dual dado el aumento de casos de drogodependientes con algún tipo de trastorno mental.