Las praderas de vegetación acuática han regresado a l'Albufera. Así lo ha asegurado el director general de Medio Natural y Evaluación Ambiental, Antoni Marzo, quien asegura que el motivo de dicha recuperación se encuentra en las aportaciones de agua menos contaminada que se han realizado al lago, así como en la vigilancia sobre los vertidos. Por ello, las aguas del parque natural presentan ahora un color anaranjado, que, según la Generalitat, es indicativo de su buen estado.

Marzo explicó que los aportes en nutrientes se han reducido en cerca de un 80 %, lo que hace que los crecimientos de algas sean más moderados y el agua sea más transparente. Esto ha permitido el regreso de las praderas de vegetación acuática, que antes de 1970 llenaban de vida el lago.

Según informa la Generalitat, en muestreos recientes, además del crecimiento de la vegetación acuática, también destaca la presencia de las «gambetas» y de especies de peces como el bienio, que requieren mejor calidad del agua. A su vez, también insisten en que comienza a recuperarse la pesca.

Mantener los aportes

En el pasado otoño se llevó a cabo un aporte de agua extra a l'Albufera procedente del embalse de Tous, que ha permitido estos cambios en la vegetación del parque natural. Por ello, Toni Marzo ha insistido en que estos aportes deberían mantenerse todos los años, no solo para garantizar el mantenimiento del hábitat invernal del arrozal, sino también para contribuir a la mejora del lago. Por ello, aboga por que su obligatoriedad se fije claramente en el plan de cuenca del Júcar. Asimismo, recordó que la recuperación de la laguna es posible, y que en los últimos años se ha logrado una lenta mejoría.