La contratación de Fitur sentó en el banquillo de los acusados a la expresidenta de las Corts y exconselleria de Turismo (la popular Milagrosa Martínez) y fue algo así como el emblema de la corrupción que trajo a la Comunitat, Alvaro Pérez «El Bigotes». Difícilmente ese escándalo se repetirá, al menos en la edición de 2017, pero eso no exime a los actuales gestores de Turismo de verse en los papeles por una tramitación que para el PP rocha la chapuza. Tal es así que el secretario autonómico de Turismo, Francesc Colomer, comparecerá en las Corts para dar explicaciones de la adjudicación del stand de este año después de que el PP denunciara ayer irregularidades en un proceso en el que toda prevención habría sido poca dado los antecedentes.

La coordinadora general del PPCV y portavoz adjunta del grupo parlamentario, Eva Ortiz, fue la encargada ayer de explicar el periplo de un contrato que al final ha acabado adjudicándose por un proceso de negociado sin publicidad, es decir, «a dedo» y por 850.000 euros a una empresa que previamente había sido excluida del concurso público por un error en la documentación. El contrato a favor de esta firma (Alavés Montajes) se formalizó el 4 de enero, es decir dos semanas antes de dar comienzo la feria más importante para los intereses de la Comunitat.

Pero para llegar a este punto, según la documentación aportada por el PPCV, hubo un concurso público fallido que arrancó consumido ya 220 días del ejercicio.. Así, en 9 de agosto „«con agosticidad y alevosía», según Ortiz„, se publicó en el DOGV la licitación. Un mes después (el 7 de septiembre) se acabó el plazo para las ofertas y tres días después se reunió la mesa de contratación. La sorpresa es que dos de las firmas fueron excluidas (Publicidad Alicantina SA y Viajes El Corté Inglés) por «por haber desvelado los propios licitadores el secreto de sus proposiciones antes de los actos públicos de apertura de las mismas», según consta en la resolución firmada el 27 de septiembre por Colomer por la que se declaraba desierto el concurso. La empresa que se salvó de esta primera criba fue excluida el 22 de septiembre.

Sin adjudicataria y a tres meses de que se celebrara el evento, Colomer inició un procedimiento de negociado sin publicidad y por urgencia (acortando a la mitad los trámites) en el que invitó a las mimas tres empresas. Finalmente fue elegida Alavés.

Ley de contratos

Y al PP este proceso le chirría. Ortiz acudió ayer a la ley de contratos para subrayar que sólo se puede adjudicar a dedo cuando en el concurso no ha habido aspirantes o éstas son inadecuados. Y se preguntó cómo se volvió a invitar a dos empresas que en teoría «habían sido expulsadas por hacer trampas». Para el PPCV también es sospechoso que la empresa montara un stand tan grande como el expuesto en Fitur con tan poco tiempo de margen y se preguntó si hubo alguna comunicación con el adjudicatario antes de la firma del contrato. En suma, los populares han exigido la comparecencia de Colomer y el expediente para aclarar las anomalías.

La respuesta de Turismo no tardó en llegar. Colomer mantuvo que se había cumplido de forma «escrupulosa» con el procedimiento legal y solicitó la comparecencia urgente para explicarlo. Fuentes de AVT explicaron que ayer mismo pusieron el expediente a disposición del PP y que, a pesar de las prisas expuestas, los populares no habían acudido al organismo. Desde la AVT se puntualizó también que el procedimiento de negociado estaba avalado con un informe de la Abogacía y que la empresa había tenido tiempo para trabajar porque la comunicación de que era la elegida se hizo el 7 de diciembre. «Soy el primer interesado en no empañar el éxito de Fitur con ninguna sombra de duda», sentenció Colomer.