La Entidad Pública de Saneamiento de Aguas Residuales (Epsar) ha abierto una guerra con la Diputación de Valencia por las 59 depuradoras públicas que gestiona la empresa mixta Egevasa, 51 % de la cual es propiedad del ente provincial.
Ayer se produjo la segunda reunión de la comisión de negociación y tampoco hubo acuerdo a la intención del gerente de la Epsar, Enrique Lapuente (nombrado por el ala verde de Compromís), de denunciar el convenio de 1997 entre ambas instituciones y que provocaría la entrada de empresas privadas en el tratamiento de estas plantas cuya construcción abonaron la administración provincial (40 %) y autonómica (60 %).
En el encuentro de ayer celebrado en la Conselleria de Medio Ambiente las posturas iniciales se mantuvieron invariables y los asistentes se emplazaron a una nueva reunión en la que presentarán informes jurídicos, la Epsar de la Abogacía de la Generalitat y la diputación de su intervención.
Enrique Lapuente, que estuvo acompañado por el secretario autonómico Julià Álvaro, defendió que tiene la intención de denunciar el convenio porque la entrada de empresas privadas harían la gestión más eficiente y el control mejoraría. «Lo que queremos es que el servicio sea el mejor posible», explicó Julià Álvaro en declaraciones a Levante-EMV.
Desde la diputación explicaron que hay voluntad de «salvar el convenio» y recordaron que la gestión de Egevasa es pública, ya que el ente provincial dispone del 51 % del capital y Aguas de Valencia del 49 %. Las mismas fuentes defendieron la eficiencia de Egevasa ya que el coste de depuración de cada metro cúbico de agua es de 0,52 euros, mientras que en Alicante centro es de 0,57 euros y en la Diputación de Castelló es de 0,92 euros, el más caro de las cinco zonas en las que se divide la Comunitat Valenciana. En Castelló, el ente provincial gobernado por el PP ha adjudicado todas las depuradoras a la empresa Facsa con el beneplácito de la Epsar que aprobó el convenio en noviembre de 2016.
Desde la Diputación de Valencia reiteraron que «los precios de Egevasa están acordados entre la Epsar y la empresa mixta.
Durante la reunión hubo un par de momentos de tensión, como cuando la diputación defendió que Egevasa era pública. Julià Álvaro replicó que para ser pública la Diputación de Valencia se debería hacer con el 49 % que actualmente tiene Aguas de Valencia. A lo que el representante de la diputación contestó que la Epsar podría hacer lo mismo en Castelló y nacionalizar la gestión de las depuradoras conveniadas con la diputación castellonense.
En este debate que enfrenta a instituciones, pero también a partidos puesto que el representante del PSPV en la Epsar Ramón Marí se alineó con la diputación, también han entrado los sindicatos. UGT ha criticado a la Epsar por querer la entrada de empresas privadas lo que repercutiría en el empleo y en las condiciones laborales de los trabajadores de la empresa mixta Egevasa.
