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Entrevista | Mariano Vivancos

Vivancos : "Tenemos que pensar por qué las aulas de la pública están vacías"

"Si las familias solo pueden elegir una educación pública y no religiosa, no se están garantizando sus derechos"

Vivancos : "Tenemos que pensar por qué las aulas de la pública están vacías"

Mariano Vivancos asumió hace poco más de un mes el cargo de director gerente de la Federación Valenciana de Centros de Enseñanza (Feceval), la principal patronal de la educación privada y concertada de la Comunitat Valenciana. Fue subsecretario de Educación con el conseller Alejandro Font de Mora y también director general de la Agència Valenciana d'Avaluació i Prospectiva (AVAP). Desde 2013 focalizó su actividad profesional en la educación superior virtual, concretamente en la primera universidad privada española totalmente online, la Universidad Internacional de La Rioja (UNIR), de la que ha sido secretario general. Reconoce que llega a Feceval «en un momento difícil, fundamentalmente porque los intereses legítimos de los asociados merecen una extrema cautela desde el punto de vista de la defensa de los mismos ante la nueva programación educativa en el ámbito valenciano».

¿Le preocupa que la Generalitat haya anunciado la construcción de 200 centros educativos públicos a través del nuevo plan «Edificant» de colaboración con los ayuntamientos?

Nos llama la atención que se anuncien 200 nuevos colegios e institutos tras una trayectoria de construcción de centros en la última etapa muy importante de casi 400 centros de nueva factura por los gobiernos populares. Nos gustaría saber más, porque al final consideramos que la red tal como está configurada está perfectamente diseñada. Siempre hay nuevas necesidades, pero hay una demanda social de enseñanza concertada que está ahí y que no se puede ver perjudicada fundamentalmente por esas construcciones nuevas.

Entonces, ¿teme que dicho plan de construcción de colegios propicie un trasvase de alumnado de la concertada a la pública?

Al final hay una programación educativa, pero si hay aulas vacías en la enseñanza pública como reconoce la Administración ¿por qué es necesario construir nuevos centros? Si es para eliminar barracones es un objetivo legítimo, pero si es para instalar una nueva oferta pública allí donde la demanda social de enseñanza concertada cubre las necesidades, nos van a encontrar.

¿Peligra la libertad de enseñanza con el Consell del Botànic?

Es cierto que hay elementos consustanciales a la libertad de enseñanza que en un primer momento se han cuestionado, pero afortunadamente han ido modulando su discurso y las posiciones de máximos que llevaban en sus programas electorales.

El decreto de conciertos educativos del Consell no contempla la demanda social de enseñanza concertada de la que ustedes hacen bandera en etapas posobligatorias como Bachillerato o FP.

En España ha habido en las últimas décadas un avance de la gratuidad de la enseñanza que alcanza a la educación postobligatoria, y eso se debe tener en cuenta. Al final, lo que vienen diciendo la reciente jurisprudencia es que no hay una diferencia sustancial entre la enseñanza obligatoria y postobligatoria, y siempre que esas enseñanzas garanticen una demanda social deben ser respetadas. No es algo graciable. Nosotros partimos de que los conciertos son un derecho subjetivo de los centros de carácter legal, no un elemento de discrecionalidad administrativa. Así lo contempla la legislación desde la Ley Orgánica del Derecho a la Educación (LODE) de 1985, que es una ley socialista, que plantea un sistema dual con una doble oferta que garantiza un derecho constitucional de los padres que es la libre elección de centro, que se inserta en el corazón mismo de la libertad de enseñanza. Si achicamos el espacio de la libertad de enseñanza, de la libertad de elección de centro, estamos vulnerando la Constitución y desmontando el sistema de conciertos.

El recorte de conciertos de Bachillerato no ha sido tan intenso cómo preveían. Se temía la no renovación de medio centenar de lineas y al final fueron 31, que luego se quedaron en 27. Por tanto se mantienen el 87 % de las aulas concertadas por el PP en esta etapa postobligatoria. Además el Tribunal Superior de Justicia ha devuelto de forma cautelar ocho de las líneas suprimidas...

Ahí hemos tenido mucho que ver las distintas organizaciones empresariales, que nos reunimos con la conselleria y que hicimos que ese aterrizaje fuera más suave. Pero, desde el punto de vista de nuestros asociados, no podemos contentarnos con esa foto. Una foto que se está moviendo con los recientes fallos judiciales que nos vienen dando la razón con la devolución cautelar de los conciertos suprimidos. Además, los jueces lo hacen con argumentos muy similares a los que venimos planteando desde Feceval: que la diferencia entre la enseñanza obligatoria y postobligatoria se ha diluido, por lo que hay que tender al objetivo de la gratuidad... Hay que tener en cuenta que las familias que eligen una educación puramente privada, pagan dos veces: abonan el recibo de su colegio y a través de sus impuestos pagan la enseñanza de todos. Eso tiene un retorno evidente del que esas familias también se tendrían que beneficiar, bien a través de desgravaciones fiscales o de una política de cheque para que gasten donde quieran como en Suecia.

La Conselleria de Educación, especialmente en enseñanza no obligatoria, considera a la concertada como una red subsidiaria de la pública. ¿Lo comparte?

No la concertada no es una red subsidiaria de la pública. No está para ocupar los huecos donde no llega la pública. La concertada es igualmente legítima porque garantiza esos espacios de libertad que permiten a los padres escoger la educación que quieren para sus hijos. Si las familias sólo pueden elegir una educación pública y no religiosa no se están garantizando sus derechos. Si estamos acotando el espacio de la concertada, incluso también en los ámbitos postobligatorios, estamos negando un derecho constitucional y de eso tiene ser consciente la Generalitat.

En la Comunitat Valenciana, el 26 % del alumnado se forma en la concertada, el 70 % en la pública y el 4 % restante en la totalmente privada. ¿Cree que se debería aumentar la oferta concertada?

Nos gustaría que al menos este equilibrio se respetara en el mapa resultante de este proceso de renovación de conciertos al que asistimos. Hay que reconocer que la media autonómica cambia en el caso de la provincia de València, donde sube al 38 % y en el ámbito de la ciudad de València, donde el 53 % del alumnado estudia en la concertada. Por tanto, no es un mapa homogéneo. En la medida de que estas proporciones se menoscaben las opciones de libertad educativa se reducirán para los padres.

Uno de los grandes atractivos de la concertada para las familias es la oferta desde Infantil hasta Bachillerato en un mismo colegio. A esto se suma ahora que la gran mayoría de esta red no está por implantar la jornada escolar intensiva mientras son cada vez más colegios públicos que concentran todas las clases por la mañana. ¿Cree que la jornada partida aumentará el atractivo de la enseñanza concertada?

Por supuesto, eso es una ventaja competitiva respecto de la pública. De hecho está influyendo ya y en el futuro va a contribuir a aumentar aún más la demanda social de la enseñanza concertada frente a la pública. Tenemos que pensar entre todos por qué las aulas de la pública están vacías, no sólo en cómo llenarlas. Si no, fundamentalmente, en por qué se quedan vacías: por la innovación educativa, por la oferta de las enseñanzas, por el inglés, por las jornadas escolares, por las extraescolares... Hoy por hoy el sistema educativo tiene el banco de pruebas de la innovación básicamente en la concertada y en la privada, y eso es una realidad objetiva.

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