El cardenal arzobispo de Valencia, Antonio Cañizares, fue el encargado este jueves de oficiar la misa fúnebre en memoria de Carmen Franco, única hija del general Francisco Franco, fallecida el pasado 29 de diciembre.

Cañizares afirmó en su homilía que Carmen Franco "no conoció ni el miedo, ni el rencor" durante su vida y elogió su "humildad y sencillez".

La misa fúnebre, que se celebró en la iglesia jesuita de San Francisco de Borja, en la calle Serrano de Madrid, contó con la numerosa asistencia de familiares, amigos y allegados, en un templo abarrotado.